El atacante no disfrutó del todo el debut en el torneo.
El Mercurio
SANTIAGO.- Durante la semana el atacante Alexis Sánchez fue claro: “Estoy contento con la temporada que tuve con el Arsenal, pero igual quedé con un gusto amargo porque quería ganar la Premier League y la Champions, siempre quiero más”.
Y parece que tiene razón el delantero, pues tras la victoria de Chile sobre Ecuador por 2-0 el tocopillano dejó el campo molesto porque no pudo marcar ante los más de 45 mil forofos que llegaron al Estadio Nacional.
Si bien su arranque del compromiso fue más que prometedor, luego que a los 2 minutos del lance tuvo una clara ocasión para batir al espigado meta ecuatoriano Alexander Domínguez, cuando el nacional dejó la marca de un defensa, entró solo al área pero su remate se fue algo mordido.
Dos minutos más tarde nuevamente Alexis tuvo el gol en sus pies, pero el sombrerito que intentó fue controlado de buena forma por el golero.
Tras esto, su protagonismo continuó absolutamente activo, con triangulaciones en ofensiva con Jorge Valdivia y por la banda derecha con un movedizo Mauricio Isla.
En la segunda etapa Sánchez no bajó su intensidad de juego, pero ahora cumplió facetas más de habilitador, ya que Valdivia evidenció un claro cansancio.
El formado en Cobreloa se veía ganoso, quería marcar. Y fue así que a los 50’ inventó un verdadero parque de diversiones en el área rival al dejar anulado a dos defensas, pero finalmente perdió la bola en una clara acción para anotar.
Buscaba Alexis el gol pero éste no llegaba. Poco fino el ex Barcelona y eso finalmente le pasó la cuenta, sin embargo, a los 83’, el goleador de los “Gunners” tocó de forma magistral para Eduardo Vargas y el delantero del Napoli metió una impecable derecha que nada pudo hacer el portero de Ecuador. Golazo de Chile.
Termina el partido y Sánchez se fue sin levantar los brazos con la hinchada roja. Su gol nunca llegó y eso terminó por molestarlo, lo que quedó de manifiesto al momento en que todo el equipo se juntó en el centro del campo para celebrar mesuradamente los tres puntos, pero el tocopillano nunca se acercó hacia sus compañeros.
Luego, en la caminata hacia el camarín continuó distante y no habló con nadie, ni con Gary Medel que lo fue a abrazar. Sólo se limitó a levantar algo su mano izquierda para saludar a unos hinchas que querían una foto, la que nunca resultó.
Ya en la zona mixta, el defensa Gonzalo Jara reconoció que “Alexis siempre quiere hacer un gol para aportar más al equipo, quizás por eso tenía rabia pero ya en el vestuario se calmó y estaba feliz por el triunfo”.
Fue la noche de Alexis, esa noche que quedó con gusto a poco para el nacido en Tocopilla y que ahora buscará reivindicarse el lunes ante México.
