MOSCÚ.- El Ejército de Ucrania aseguró hoy que 80 combatientes separatistas murieron y otros 100 resultaron heridos en un fallido intento de los rebeldes prorrusos de asaltar la ciudad de Marinka, en el este del país, controlada por las tropas del gobierno.
En los enfrentamientos murieron también cinco soldados ucranianos, informó ante la prensa en Kiev el portavoz militar ucraniano Andriy Lysenko. Se trata de los combates más mortíferos desde que las partes en conflicto firmaron un acuerdo de cese del fuego en febrero.
El gobierno ucraniano y los rebeldes prorrusos se acusaron mutuamente de haber lanzado ataques en los alrededores de Marinka, situada a unos 30 kilómetros al suroeste de la ciudad de Donetsk, un bastión de los insurgentes.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) había asegurado previamente que los separatistas prorrusos habían desplegado artillería pesada hacia la denominada "línea de contacto", en contra de lo acordado en el último alto el fuego.
En ese acuerdo de alto el fuego, rubricado en Minsk, la capital de Bielorrusia, las partes en conflicto se comprometieron a retirar el armamento pesado al menos 50 kilómetros de la línea del frente.
Sin embargo, la noche del martes se detectó el movimiento de una decena de tanques y otros vehículos armados desde la ciudad de Donetsk, antes de que se desataran fuertes combates en torno a la ciudad de Marinka.
El Ejército ucraniano informó a la OSCE que también desplegaría artillería pesada en la línea del frente para enfrentar la "amenaza real" que suponen los combates de Marinka.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, defendió el uso de artillería pesada y explicó que el Ejéricto repelió "de forma adecuada" al ataque de los rebeldes en Marinka.
Durante su discurso sobre el estado de la nación, Poroshenko responsabilizó a Rusia de la escalada de violencia. "La zona de Donbás habría olvidado la guerra como si de un mal sueño se tratase si Moscú quisiera la paz tanto como Kiev", advirtió el presidente ucraniano.
Según Poroshenko, en la zona luchan en la actualidad 14 grupos de combate rusos con más de 9.000 soldados apoyando a los rebeldes. Moscú lo niega y acusa a Kiev de poner en peligro el plan de paz.
Según estimaciones de Naciones Unidas, más de 6.400 personas han muerto desde que estalló el conflicto en el este de Ucrania, en abril de 2014.
