SANTIAGO.- El caso Corpesca se encuentra en espera de lo que se resuelva sobre la petición de desafuero del senador UDI Jaime Orpis, quien es investigado por cohecho, fraude y lavado de dinero. Su defensa pidió la incompetencia de la Corte de Santiago, por considerar que debe ser la de Valparaíso la que debe resolverlo pues el principio de ejecución está, para ellos, en el Congreso Nacional.
Según informa hoy
"El Mercurio" esta semana declararon nuevamente las ex asesoras del parlamentario Carolina Gazitúa y Bárbara Molina. Ambas aseguraron que Orpis le pidió boletas en reuniones que se sostuvieron en Santiago: la casa de acogida Esperanza, su oficina en la sede del Congreso capitalino y en la oficina de senadores UDI en calle Suecia.
Molina sostuvo, junto a su abogado Ricardo Freire, que Orpis "me dice en estas reuniones que tenía que pagarle al resto de los asesores y que era más fácil que se emitiera una sola boleta. Quiero aclarar que a mí en ese entonces no me pagaba, por lo que le devolví el total de lo que a mí me depositaron, menos el 10% para pagar el impuesto".
La abogada, quien conoce hace 25 años al senador Orpis, declaró que "el 2009, Jaime me señala que necesitaba un par de boletas para financiamiento de la campaña, y yo accedí sin preguntarle nada (...) Yo confiaba en Jaime, para mí era de las personas más honestas y probas que conocía".
Sobre la petición de boletas para él y luego para el Senado, Gazitúa corrobora que "la propuesta de operar con estas boletas por montos mayores a mis honorarios fue en Santiago. Yo en Valparaíso a Jaime no lo vi nunca, salvo en tres oportunidades a las que referí".
