SANTIAGO.- La Presidenta Michelle Bachelet, junto al canciller Heraldo Muñoz, participó en la inauguración del 158° periodo de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que se desarrolla en el salón O’Higgins del Ministerio de Relaciones Exteriores.
En la oportunidad, la mandataria afirmó que la CIDH "en el pasado tuvo la capacidad de acompañar las tareas nacionales de superación de la pesada herencia de las dictaduras, empujando la necesidad de verdad y justicia frente a las graves violaciones a los derechos cometidas".
Agregó también que "hoy la Comisión ha avanzado hacia otros ámbitos, que la extensión de la democracia ha permitido revelar con mucha mayor intensidad".
La Presidenta también destacó que "a pesar de haber dejado atrás gran parte de las amenazas más acuciantes a los derechos fundamentales, la región sigue enfrentando retos".
Frente a esto, la Mandataria dijo que "La más evidente es la enorme brecha que divide a nuestras sociedades, la desigualdad que afecta a nuestros países en forma persistente y el efecto que ello tiene en la dignidad y oportunidades de las personas".
De este modo, subrayó la especial preocupación "por promover derechos como el acceso a la salud y a la educación, la propiedad colectiva de la tierra, el goce de un medio ambiente sano, el acceso a la información pública, los derechos de las minorías sexuales, entre otros".
Asimismo, la mandataria destacó los obstáculos del reconocimiento que aún persiste en los derechos de las mujeres "y también el reconocimiento de las mujeres en la construcción de una sociedad más cohesionada".
Al finalizar sus palabras, aseveró que "hoy, al igual que hace 7 años atrás, seguimos considerando indispensable que la dignidad y los derechos iguales e inalienables de la persona humana, sean protegidos por un régimen jurídico efectivo en toda nuestra América".
