SANTIAGO.- Un insólito método de ocultamiento de drogas quedó al descubierto este domingo, cuando fiscalizadores del Servicio Nacional de Aduanas detectó 660 kilos de cocaína al interior de las caras de 15 cajas de cartón en la avanzada el Loa.
El método fue descubierto cuando dos supuestos comerciantes se presentaron en el control aduanero, donde explicaron que habían comprado en la zona Franca de Iquique 30 licuadoras y 60 hervidores eléctricos, por lo que solicitaban pagar los impuestos necesarios para poder salir del lugar con las mercancías y llevarlas a Santiago.
Sin embargo, el peso y las dimensiones de las cajas llamaron la atención, por lo que el fiscalizador a cargo decidió llevarlas a un equipo de Rayos X estacionario y se determinó la existencia de una sustancia extraña. Fue así como se encontró 200 láminas plásticas de un espesor de 2 milímetros cada una y contenedoras de un total de 66 kilos 800 gramos de cocaína, que equivale a alrededor de mil millones de pesos en el mercado informal.
Las bolsas con la droga estaban cuidadosamente insertas al interior de cartón corrugado, el cual fue cortado, pegado y doblado como si fuese una tradicional caja de embalaje. Es más, para que parecieran reales, los envases tenían impresos los códigos para almacenaje y el tradicional "Made in China".
"Es primera vez que tenemos este tipo de ocultamiento, donde además de llamar la atención el minucioso trabajo para mimetizar la droga, se demuestra la existencia de una acción dolosa que incluye una estrategia distractora. En efecto, quisieron distraer la labor fiscalizadora mediante el ardid de un comercio lícito. Incluso solicitaron que les calcularan los impuestos para pagar los derechos por los electrodomésticos que llevaban", aseguró el director regional de la Aduana de Iquique, Ricardo Aceituno Chau.
