El senador José Miguel Insulza se refirió esta mañana a las críticas recibidas por ausentarse de la acusación constitucional en contra del intendente metropolitano, Felipe Guevara, calificando como "virulento" el comportamiento de su sector o de la forma en que se desarrollaron los comentarios en redes sociales.
A través de una carta enviada a la directiva del PS y a sus militantes, el parlamentario desarrolló las razones de su ausencia, explicando que tenía programado un viaje fuera de Chile que incluía una actividad como parte de su actividad política, pero también apuntó al contenido del libelo, destacando que varios senadores reconocieron que tenía "fallas en su elaboración" y sustento jurídico.
Además, plantea que con estas acciones "se intenta apelar a la emocionalidad y la emotividad, ante una evidente pérdida del norte político. Y se genera una falsa dicotomía: si se aprueba, se está por los DD.HH., si se rechaza, se está en contra de los DD.HH.".
"Me parece injusto decir cómo hubiera votado, porque yo no estuve. Pero la verdad es que le encontraba un montón de fallas a la acusación, que eran principalmente un recuento de cosas que habían ocurrido efectivamente, pero en las cuales no estaba adecuadamente demostrado lo que aquí es principal", sostuvo esta mañana en conversación con T13 Radio, destacando que lo que se intentaba mostrar, esto es, actos contra la Constitución, "no estaba suficientemente planteado en el texto que yo leí".
"Las acusaciones constitucionales, lo más que pueden conseguir es hacer que una persona quede sin derechos políticos durante cinco años, pero no van a resolver el problema de fondo"
José Miguel Insulza, senador PS
Asimismo, criticó la suerte de instrumentalización de las acusaciones constitucionales contra miembros del oficialismo, indicando que alguien en el Senado sostuvo que "cualquier oportunidad para condenar al Gobierno por la violación a los derechos humanos es válida", argumento que a juicio de Insulza da pie para que sólo por el hecho de considerar que el Ejecutivo ha hecho un mal trabajo, se comiencen a atacar a sus personeros.
En esa línea, recordó que "las acusaciones constitucionales, lo más que pueden conseguir es hacer que una persona quede sin derechos políticos durante cinco años, pero no van a resolver el problema de fondo".
Crisis al interior de los partidos de oposición
El senador también apuntó a otros aspectos del comportamiento del bloque opositor, pues a su juicio, "el asunto es que tenemos asuntos pendientes que discutir y que es importante hacerlo con seriedad y altura de miras, y no a los insultos". Entre ellos, destacó la actitud frente a la violencia, y la labor que han hecho en todos los años precedentes, "en que parece que no hubiéramos sido gobierno durante 24 años, sino que estuviéramos llegando recién a la política nacional", criticó.
Insulza dijo estar preocupado por temas como "qué hacemos nosotros respecto a la violencia. Todavía hay gente que se siente identificada con las cosas que hacen los grupos que vandalizan la ciudad (...) creo que las primeras líneas son ajenas a nuestra política y no van a llevarnos a ninguna parte. Cuando uno funa o hace a alguien bailar por la calle, está abusando de esa persona", destacó.
"Yo quiero que mi partido diga eso, que es un abuso brutal, que eso no se hace, y que no condene a los que de buena o mala manera legislamos para que no siga ocurriendo eso", sostuvo. Por eso, aprovechó de hacer un llamado a su tienda para tener "una discusión de fondo", destacando que su intención es que se reflexione respecto al trabajo que han hecho en los gobiernos anteriores, en su rol como oficialismo.
Por eso, Insulza destacó el valor de la autocrítica que se debe tener en la reflexión, destacando que "en los últimos años nos dejamos a estar en cuanto a cómo progresar en el país (...) en eso consiste la autocrítica, en reconocer que uno dejó de hacer algo que debió haber hecho, y creo que nosotros nos dejamos estar durante mucho tiempo".
Con todo, dijo que ha recibido buenos comentarios por parte de los miembros de su colectividad frente a la misiva, pues "algunos dicen que este es el nivel en que hay que plantear la discusión", aunque dijo tener claro que quienes estén en contra con el contenido de la carta pueden demorarse un poco más en reaccionar.
"Este es un llamado al debate, pero sobre todo a la unidad, porque como se ha dicho muy bien, si llegamos divididos al plebiscito, no esperemos tener grandes resultados", sentenció.
