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Científicos nacionales aterrizan el impacto en Chile del informe sobre el aumento en el nivel del mar

El documento presentado por la ONU alerta que de mantener los niveles de emisiones actuales de gases de efecto invernadero no sólo se pasará de la meta de 2°C, sino que algunos territorios podrían verse fuertemente comprometidos por inundaciones.

25 de Septiembre de 2019 | 16:02 | Por Thomas Heselaars y Camila Díaz, Emol.
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EFE (Archivo)
Este miércoles fue clave para los mares del mundo. El Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) presentó su informe sobre océanos en el que detalla una proyección preocupante: el nivel del mar podría aumentar hasta en un metro dentro de 80 años si es que no se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero.

De acuerdo al documento, si la humanidad es capaz de limitar el aumento de la temperatura a sólo 2°C por sobre los registros preindustriales, el aumento del nivel promedio del mar sería de entre 30 a 60 centímetros.

Ante esto, diversos científicos nacionales en distintos puntos de la costa analizaron qué significa realmente este metro promedio que podría ocurrir para el año 2100 y por qué se produce esta variación. Además, entregan luces sobre cómo podría afectar a Chile un cambio de esta magnitud tanto en su economía como en el medioambiente.




¿Qué significa y cómo podría afectar a Chile?

Osvaldo Ulloa
Académico de la Universidad de Concepción y director del Instituto Milenio de Oceanografía

Lo primero que hay que tener en consideración es que en el océano global el aumento del nivel del mar no es homogéneo. Es decir, hay regiones donde el nivel del mar aumenta más y va a aumentar más. Otras regiones donde el nivel del mar no ha aumentado tanto como en otras partes. Lo que respecta a nuestra región, que es del Pacífico Sur Oriental, no ha aumentado al nivel en que ha aumentado al otro lado del Pacífico, digamos frente a Nueva Zelanda, Australia.

También, el efecto que tenga el aumento en el nivel del mar va a depender de la geografía del país. Las islas donde la tierra está a centímetros o muy pocos metros por sobre el nivel del mar las consecuencias van a ser mucho mayores. En zonas como Chile -por ejemplo- donde tenemos una Cordillera de la Costa y tenemos que el nivel de la tierra aumenta rápidamente, las consecuencias van a ser menores.

El nivel de afectación va a depender de cómo hagamos las cosas y cómo usemos el borde costero para la población, en términos de construcción, de cómo habitamos, cómo construimos nuestros puertos, cómo usamos los planes reguladores, cómo hacemos zonas de mitigación. Obviamente hay otros países que están muchos más complicados que nosotros.

Pero el nivel del mar es sólo uno de los aspectos que vienen en el informe. También se hace un diagnóstico de cómo ha cambiado el océano, se habla de la región de la corriente de Humboldt que ha sido una de las que ya se ve el impacto, tanto en California como en Chile. Pero, tiene que ver más con la disminución del oxígeno.

Lo importante de este informe es que se considera por primera vez al océano dentro del problema climático. Por eso se espera que en esta COP25 el océano entre por primera vez en la discusión. Pero si se ven los acuerdos que van a estar en la mesa donde los gobiernos se van a poner de acuerdo, el océano no está ahí. El informe lleva el océano de ser un problema científico a un tema político, y eso es un cambio en términos de que empieza a incorporar al océano dentro del problema climático y se hace una discusión política.

Esta proyección nos está indicando cuales van a ser las consecuencias según como actuemos en los escenarios de emisiones de CO2. Desde ese punto de vista, nos pone con una responsabilidad tremenda como ciudadanos de este planeta, en que tenemos que ponernos de acuerdo y realizar los cambios. Los cambios vienen igual. Lo que deja de manifiesto es que pueden ser mayores o menores dependiendo de lo que hagamos hoy día.

Marcela Ruiz
Bióloga marina, integrante de la mesa de energía y mitigación, comité científico COP25, gerente I+D de Energy E.S.B y parte de Red de Investigadoras

Lo primero que hay que entender es la relación entre la atmósfera y el océano que es una relación dinámica que está dada, principalmente por el traspaso de materia y energía. Esto es como una triada de aumentos: el aumento en la concentración de gases de efecto invernadero, que está dado principalmente por la industria, hace que se eleve la temperatura atmosférica y eso hace que se eleve la temperatura del mar (al ocurrir esto se genera una expansión térmica) y eso incrementa el nivel del mar.

Uno de los principales afectados pueden ser los organismos y microorganismos de las zonas costeras, de las zonas oceánicas, de las zonas superficiales y de las zonas profundas. Aquí habitan especies que tienen una fisiología que muchas veces es simple y no tienen sistemas respiratorios tan avanzados y están adaptados a un rango de temperatura y otras condiciones físicas y químicas determinadas.

Somos un país pesquero, con una pesca artesanal que es muy fuerte, tenemos recolección de orilla, que está poblada principalmente por mujeres a nivel nacional. Este aumento de temperatura en agua puede generar que muchas especies migren. El calentamiento global, que es el paragua de todo esto, condiciona la economía de los territorios.

Lo importante aquí también es establecer que pasar de los 2°C -con respecto a la era preindustrial- no es una opción, y esperamos que la COP25, junto a la ciudadanía, se pueda presionar con respecto a eso.

La capacidad técnica y científica a nivel de innovación en Chile y en el mundo existe. Nosotros tenemos que enfocarnos en las soluciones y poner la tecnología disponible en ciudades inteligentes, en soluciones así. Necesitamos tener una red de monitoreo, sensores en el mar que nos esté diciendo qué está ocurriendo en tiempo real en el océano.

Los lugares que sean más bajos van a tener más probabilidad de ser afectados o inundados, pero todo va a depender de la temperatura. Porque 30 o 60 centímetros en promedio van a haber territorios afectados, pero no ciudades que desaparezcan. Claro que probablemente se va a tener que movilizar gente, correr la línea de la costa.

También se van a intensificar problemas meteorológicos, van a existir eventos meteorológicos y oceanográficos mucho más marcados, mucho más seguidos y más intensos. Para eso la población va a tener que estar mucho más en alarma y eso hace necesario tener un control territorial y no va ser lo mismo para la gente que vive en la costa y la que vive en el cerro. Aquí nuevamente es importante tener un monitoreo en línea que nos permita adelantarnos a estas situaciones.

Marcelo Oliva
Profesor titular del Instituto de Ciencias Naturales Alexander Von Humboldt de la Facultad de Ciencias del Mar de la Universidad de Antofagasta

No hay que ser alarmistas, es que no se dice que va a subir un metro, el IPCC dice que 'podría' subir más de un metro de aquí al 2100 [...] y de limitar el calentamiento global a 2°C respecto de los niveles preindustriales, podría subir entre 30 y 60 centímetros. Hay una cosa clara: de que esto va a ocurrir, va a ocurrir. Si se continúa con los actuales niveles de calentamiento, puede llegar un momento en que la situación sea irreversible.

No se puede decir que 'va a ocurrir un aumento de tanto, de aquí a tantos años'. Hay una probabilidad de que eso ocurra con un rango de variabilidad. Esto puede significar que sea menos de lo estimado, pero el rango de variabilidad también tiene un componente positivo.

El incremento en el nivel del mar, que puede parecer poco, va a tener impactos fuertes en todas esas comunidades. Va a existir un impacto ecosistémico, una modificación de las comunidades intermariales, los problemas sociales que van a estar directamente relacionados con la gente que vive o trabaja en el borde costero. Todo esto se ve afectado. Uno se da cuenta de que el impacto no es sobre la gente que va a tener 30 o 60 centímetros de altura menos o más en la playa, sino que una cadena de eventos que van a impactar en absolutamente todas las cadenas humanas.

En Chile hay una norma que te obliga que las construcciones costeras estén sobre los 80 metros del nivel de la más alta marea. Ahora, dependiendo de la inclinación de la costa va a ser el impacto de este incremento. Si tomamos una costa extraordinariamente plana, como Mejillones, es indudable que ahí podría haber un impacto fuerte y el incremento se va a notar mucho.

Aquí son decisiones políticas a nivel global. Mientras haya un Presidente como el señor Trump que dice que el cambio climático es un invento de los científicos para afectar la economía de Estados Unidos, estamos en serios problemas. Estados Unidos es una de las economías que más genera gases de efecto invernadero.

Si seguimos con este tren de cambios, ¿cuántas generaciones más va a poder soportar la Tierra? ¿En qué momento estamos de la destrucción del planeta?

Catalina Aguirre
Investigadora del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2 y académica de la Escuela de Ingeniería Civil Oceánica de la Universidad de Valparaíso

Es importante aclarar que es un metro promedio en el planeta y, además, está asociado a un escenario [y modelos] en particular, que aún es bastante incierto, porque depende de nosotros, de cómo se va a desarrollar la humanidad y esto puede impactar fuertemente si el aumento va a ser de 80, 60 o 40 centímetros, o un metro.

Lo claro es que esto es un aumento, o sea el cambio climático produce un aumento en el nivel del mar. No se va a producir, en ninguna parte, un descenso del nivel del mar porque los escenarios físicos del cambio climático dan como única posibilidad un aumento en el nivel del mar.

De nosotros depende que el aumento sea de 30, 50 o de un metro, o de más. Hasta el momento, vamos peor que el peor escenario. Y aquí no es que 'podamos' hacer algo, es que tenemos que hacer algo, y todavía estamos a tiempo de hacer ese algo.

En Chile tenemos una costa muy extensa, pero somos un país alto. No es un país comparable a islas bajas o países que están por debajo del nivel del mar. Nuestro mayor riesgo del cambio climático no es ese. Por ejemplo, un único terremoto puede cambiar el nivel del mar en dos metros y se espera que de aquí a cien años pueda cambiar en un metro. No somos de los países bajos -como Holanda, que ha debido construir infraestructura costera para que no se produzca la inundación de grandes áreas- o de las islas que necesitan un aumento de 20 o 30 centímetros del nivel del mar para desaparecer producto de esto.

Si mides todas las zonas altamente pobladas que tienen menos de 10 metros de nivel de altura con respecto al nivel medio del mar, ya te quedas con un área muy pequeña. Pero sí es importante, precisamente porque son áreas que están densamente pobladas.

Al aumento en el nivel del mar, también se le suma el aumento del oleaje, que también es una proyección, pero que se ha estado observando durante los últimos 30 años. Con consecuencias más llamativas como las marejadas en Viña del Mar, y otras más silenciosas, como el aumento de la hora de cierre en los puertos durante los últimos años, que también genera una merma económica para el país.

Yo no veo factible que en estos momentos tengamos una marejada tan extrema que pueda destruir un poblado completo, pueden destruir infraestructura, erosionar playas o dunas.

Diego Narváez
Profesor asistente del Departamento de Oceanografía de la Universidad de Concepción e investigador del centro COPAS Sur Austral.

Un aumento en cualquiera de los dos escenarios -un metro de no lograr la meta de 2°C y hasta 60 centímetros de limitar el aumento de la temperatura- es bastante malo en general. En el sentido de que todas las comunidades costeras, aunque pareciera que un metro no es mucho, pero hay ciudades enteras que pueden desaparecer y pueden quedar bajo ese rango.

En Chile como nuestras costas son un poco más altas, es cosa de ir y ver los acantilados que hay en la costa, pareciera que no provocaría tanto daño, [...] pero en general hay muchos pueblos que están en desembocaduras de ríos o ciudades como Viña del Mar, pero por sobre eso están las mareas, las marejadas, las olas que causan los vientos, entonces la extensión sobre la costa va a ser mucho mayor. Sería un metro promedio si es que no hubiera ningún movimiento del mar. Lo cual sabemos que no es así.

Así como desaparecer ciudades no creo que ocurra, pero reducirse sí. Todas estas ciudades que han construidos estas costaneras, Antofagasta, Viña del Mar, Puerto Montt, claramente todas esas estructuras se les ha ido quitando en parte, se ha ido rellenando y se ha ido quitando en parte una área que pertenece a la zona litoral donde el mar ejerce su acción.

Esto ha venido pasando y nosotros los científicos sabemos esto que estas predicciones de hecho es alarmante que cada vez que se analizan más datos nos vamos dando cuenta que los límites se están cumpliendo en forma anticipada de lo que uno esperaba. Se está calentando más el agua del mar y eso involucra que aumente el volumen del mar. Eso ayuda a que aumente el nivel del mar, por supuesto.

Es una reacción en cadena de distintos componentes. Tanto de la atmósfera, como del océano, y todo eso tiene impacto en las cosas terrestres. Toda esa agua derretida va a parar al mar o se evapora y se precipita y llegan nuevamente al mar. Entonces, son todas estas reacciones en cadena y en este discurso que hizo Greta, justamente habla de estas interacciones que existen entre los distintos componentes y lo que al final lo que está produciendo.

Luisa Saavedra
Doctora oceanogragía, Centro para el Estudio de forzantes múltiples sobre Sistemas Socioecológicos Marinos Musels, coordinadora de un programa de monitorio local para mejorar la adaptación de la pesca y acuicultura en el cambio climático, ONG ConCiencia Sur

Las implicancias que tiene el aumento en el nivel del mar son principalmente para los países que son muy bajos y actualmente están ocurriendo. Uno de los casos es el de Florida, en Estados Unidos, que Miami hace mucho tiempo tiene problemas de inundaciones.

Ahora en Chile se está haciendo un análisis de varias playas, creo que ya van 35 analizadas, para conocer sus condiciones. De lo que se ha avanzado, la mayoría muestra altos niveles de erosión. Esto es, por una parte por el aumento del nivel del mar, pero además aumenta la frecuencia de episodios de mar extremo, como marejadas. Con esto las playas se van achicando, entonces en zonas donde la población está muy cerca del mar como Viña del Mar o La Serena se van a ver más afectadas. Vamos a tener que comenzar a planificar cómo solucionar esto, con reestructuraciones.

Si bien marejadas siempre hay, ahora se observa que son más frecuentes y más intensas. Eso también afecta mucho la parte económica de los pescadores, algo que no menciona mucho el informe del IPCC. porque más que la temperatura son estos eventos los que preocupan a los pescadores porque no pueden salir, y si antes podían salir tres veces al día, ahora no.

Además existen otros factores en el informe del IPCC y lo peor de todo es cuando mezclan todos estos factores y los pone todos juntos. Porque una cosa es revisar los aspectos separados, el aumento en la temperatura, la disminución del oxígeno, la acidificación del PH, pero cuando los juntas, porque en el mar ocurren todos juntos, ves los efectos en las especies que están adaptadas para otras condiciones, pueden morir o tener otro tipo de problemas.

El aumento de la temperatura, también incrementa la cantidad de bacterias y patógenos, esto no está en el informe, pero se ha observado en otros estudios.
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