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Las almohadillas chilenas que quieren conquistar el mundo

Casi por casualidad, esta novedosa empresa se hizo conocida de la noche a la mañana a nivel nacional.

27 de Enero de 2006 | 13:27 |
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Cuando la "Granja VIP" del Canal 13 estaba en su peak de sintonía, el médico de los participantes les recetó unas "almohadillas terapéuticas" para que pudieran sanar las dolencias de las duras jornadas de trabajo y competencias que debían enfrentar los concursantes. La receta era bastante simple, aplicar la temperatura específica según sus requerimientos, poner en las zonas afectadas y dejarlas actuar.

Este hecho hizo que la gerente general de Trunafen, Evelyn Arancibia, y su socia y gerente comercial, María Paz Vargas, tuvieran que pasarse horas frente al computador despachando solicitudes y tratando de satisfacer los requerimientos de sus nuevos clientes. "Estaba en una reunión, y en un break me di cuenta de que tenía como 40 llamadas pérdidas de María Paz, la llamé de vuelta y me dijo que estaba al borde de colapso, que la cantidad de pedidos la había superado", cuenta Evelyn Arancibia.

Las almohadillas terapéuticas de Trunafen nacieron como proyecto hace más de ocho años, cuando Evelyn investigó, probó y testeó hasta alcanzar la mezcla adecuada de hierbas capaces de solucionar, prácticamente, cualquier dolencia.

La función principal de las almohadillas se basa en la estimulación, relajación y la circulación sanguínea. Calma el dolor y reduce la rigidez de manera natural.

Éstas se calientan en el microondas durante 2 a 3 minutos a potencia media y se colocan directamente sobre la zona afectada; para su aplicación en frío se introduce en el congelador en bolsa plástica por 30 minutos. La modalidad del uso del producto va a depender de la dolencia en cuestión.

En 2002, se presentó el proyecto a los Fondos de Capital Semilla de la Corfo, consiguiendo un financiamiento de $35 millones que le dieron el impulso definitivo a esta nueva empresa, que incluso cuenta con una certificación de calidad de la Universidad de Chile.

En diciembre del año pasado, Trunafen vendió 500 almohadillas y logró, a la fecha, tener 2.500 productos distribuidos (US$ 17.452) entre diversas farmacias naturistas. Internet también ha jugado un papel importante en esta empresa, llegando a comercializar en agosto 1.000 productos.

"Esperamos cerrar el año con ventas en Argentina, donde está contemplado un primer despacho de 1.000 productos y cerrar un acuerdo con alguna cadena de farmacia chilena que se podría traducir en una demanda de 3.000 almohadillas más para seguir con Europa, tomado a Dinamarca como "puerto de entrada" con un primer despacho de 3.000 unidades (US$ 20.800)", destaca Evelyn.

Su próximo desafío es la elaboración de cremas y ungüentos para así fortalecer su marca como abastecedor de productos naturales.
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