“Rojo Fama Contra Fama” fue el trampolín que impulsó su carrera, cual cohete. En el otrora exitoso programa de TVN destacó por su esfuerzo y dedicación, además de su singular tono de voz, lo que lo llevó a ganar la competencia de la segunda generación y grabar sus primeros discos con Warner.
El primero, homónimo, fue todo un éxito. Con su interpretación de la romántica “Me gustas” llegó a los primeros lugares en los rankings locales, por lo que obtuvo Disco de oro y Doble Disco de platino, convirtiéndose en el artista revelación del 2004 y recibiendo un APES.
Con su segundo disco en mano, “Te llevo en el alma”, fue invitado al Festival de Viña y empezó a mirar hacia fuera con giras por Latinoamérica y Estados Unidos, que destacaron por la buena recepción del público. Por lo mismo, decidió tomar clases de inglés y piano y así empezar a componer canciones para un último disco que produce por estos días.
También se le pudo ver en “Rojo, la película”, en la que interpretaba a un joven cantante que venía de regiones a buscar una oportunidad a Santiago, tal como ocurrió en su vida real.
-¿Sientes alguna nostalgia de tu paso por “Rojo”?
“Por lo que fue en un minuto porque han cambiado muchas cosas. Sí valoro que aún estén buscando gente nueva, pero también hay que tener cuidado porque el mercado no es tan grande como para tener tantos artistas. En su momento vivimos cosas lindas, que a muchos les habría gustado, como cuando íbamos a Talcahuano, por ejemplo y teníamos llenos totales. O llegar al aeropuerto y que hubieran mares de gente esperándonos. Hasta para los directores del programa fue muy fuerte la repercusión que tuvo, sobre todo en regiones”.
-¿No se te subieron los humos a la cabeza en ese minuto? ¿Cómo te mantuviste centrado?
“Es fácil perder la cabeza y me ha ayudado bastante tener tranquilidad espiritual, desde siempre; cantaba en el coro de la iglesia y no me arrepiento y sigo manteniendo ese vínculo. Hay gente que cree que por tener seguridad en ti es que se te suban los humos a la cabeza, pero no tiene nada que ver. Hay que tener seguridad en ti porque si tú no crees, nadie va a creer en ti. Si me desplazo de una manera y miro a la cara de otra forma, no significa nada, pero no puedo seguir como hace cinco años cuando llegué pidiendo una oportunidad o porque me compré un auto, entonces la gente te compara. Pero es raro, porque la gente te quiere ver bien pero cuando te ve tan bien tampoco quería tanto”.
-¿El programa ya no es lo mismo porque cumplió un ciclo y va en picada o porque se fueron casi todos los que subían el rating?
“No es lo mismo porque están probando una nueva fórmula, más bien están probando nuevos ingredientes y está recién partiendo, hay que darle tiempo. Cuando partimos nosotros nadie veía el programa y fue madurando hasta que agarró vuelo y no lo paró nadie. Ahora tampoco lo he visto tanto como para darle más vueltas. Ocupo ese tiempo en otras cosas. No me puedo quedar pegado y es importante no quedarse pegado en el ayer”.
-Pero sin duda que fue tu trampolín, sin tu paso por el programa no hubieras logrado todo lo que alcanzaste.
“Me sirvió y yo les serví y mis compañeros también. Ellos entregaron mucho por nosotros y nosotros para ellos”.
-Pero son pocos los que sobreviven hasta hoy.
“Eso lo sabíamos de un principio y depende de la carrera paralela que hagas porque si te quedas sólo con lo que te entrega la televisión está mal. Hay que tener otras cosas afuera, no hay que descuidar las radios o regiones y si me preguntan eso, la verdad es que a mí me ha ido muy bien”.
-¿Nunca pensaste dedicarte a la tele en forma paralela?
“Es que ahí tienes que decidir qué quieres para tu vida y ese planteamiento lo tienes que tener claro desde un principio; si te quieres quedar porque pagan bien o realmente buscarte el camino difícil, el camino de ser artista. Buscar otros mercados no es fácil pero yo llegué a Santiago, a la TV, sin ninguna posibilidad, ni un contacto. Pero pensaba que lo podía lograr algún día porque sentía que algo iba a pasar con eso, que algún día sí iba a poder cantar y mostrar mi música. Y lo logré, salí de Graneros que es un pueblo, llegué acá, a estudiar y trabajar y ahora en este minuto pienso que algo viene también y eso me hace trabajar día a día y no dejar de lado mis esfuerzos. Si pensara que no van a resultar las cosas, no va a pasar nada. Por último hay que intentarlo, no que pasen 20 años y pensar en qué habría pasado si… soy muy perseverante”.
-¿Y actuar en la película de “Rojo” y en otras cosas lo tomaste sólo como un complemento para tu carrera?
“Son cosas que no esperaba, cuando entré al programa iba por un disco porque ese era el premio y para eso entré y lo obtuve. Las cosas se dan, aparecen y tienes que evaluarlo y decidir. La tele llama la atención, es bonita, pero también está el otro lado, para dónde vas. Hay otros más astutos que tratan de hacerlas todas pero es más desgastador y ahí se quedan.
“Como experiencia fue buena, no lo esperaba y a todos los que estábamos nos hicieron el casting y si me dejaron fue por algo. Pero lo mío es cantar y si me invitaron a plasmar mi vida en una película tenía que disfrutarlo mucho y entregar todo lo mío y así fue”.
