El Mercurio (imagen referencial)
TEHERÁN.- Irán obligará ahora a las parejas que se quieran divorciar de mutuo acuerdo, a reunirse antes con un consejero conyugal para intentar reducir el número de separaciones.
Esa medida anunciada por los medios locales, que citaban a una responsable de la autoridad judicial, se enmarca en una gran ley sobre la familia adoptada en 2013.
La tasa media de divorcios en Irán alcanzó un récord del 21% el año pasado, y es aún más alta en las grandes ciudades.
El diario Shargh (reformador) indicaba hoy que en 2014 hubo más de 30.000 divorcios en Teherán, el 90% de ellos de mutuo acuerdo.
"Está prohibido aprobar un divorcio de mutuo acuerdo sin consultar a un consejero conyugal", declaró Parniam Ghavam, responsable de la Oficina de Consejo y Trabajo Social en la autoridad judicial, citada por la agencia Tasnim.
"A partir de ahora, sin esto no será posible presentar un expediente de divorcio", insistió.
La pérdida de afecto, las injerencias de las familias, los actos de violencia conyugal y la drogodependencia de uno de los esposos son los principales motivos de divorcio, según las autoridades.
"El papel del consejero es reducir la tasa de divorcios, sobre todo los que se hacen de mutuo acuerdo", explicó Ghavam.
Esa nueva ley debe "consolidar los fundamentos de la familia, impedir el aumento de los conflictos familiares y los divorcios e intentar crear un espíritu de reconciliación", añadió.
Los encuentros deben permitir al consejero conyugal nombrado por el Estado pronunciarse sobre la viabilidad de la pareja e informar al juez de asuntos familiares, único capaz de dictaminar un divorcio.
El mes pasado,
el gobierno lanzó una página web en la que religiosos y profesionales relacionan a solteros susceptibles de formar una unión duradera.
