NUEVA YORK.- El hasta ahora intocable jugador de los Knicks de Nueva York en el básquetbol de la NBA, el jamaicano Patrick Ewing, podría ir a los SuperSonics de Seattle en un cambio que involucraría a cuatro equipos y seis jugadores, dice el periódico "The New York Daily News". No obstante, pese a la aseveración del diario neoyorquino, ninguno de los equipos involucrados han confirmado el traspaso.
Once veces "All Star" y líder en anotación de la franquicia neoyorquina, Ewing podría ser cambiado antes del comienzo de la próxima temporada, por lo que los Knicks recibirían en el trato al ala-pívot de Seattle Vin Baker, integrante del equipo olímpico de los Estados Unidos para Sydney 2000.
Además, los Knicks se harían también con los servicios del base Glen Rice y el también "pívot" Travis Knight, ambos de Los Angeles Lakers.
En cambio, el equipo californiano podría recibir al ala-pívot Christian Laettner y al centro Chris Dudley, procedentes de los Pistons de Detroit y los Knicks, respectivamente.
Por su parte, los Pistons de Detroit, buscando reemplazar la perdida de Grant Hill, llegarían a aceptar un par de selecciones en la primera ronda del draft. Hill se marchó recientemente a Orlando con un contrato de siete años y 93 millones de dólares.
Según lo dicho por el diario, los Knicks y los Sonics estaban manteniendo una negociación que podría enviar a Seattle a Ewing, de 38 años, quien cobrará un salario de 14 millones de dólares en su último año de contrato.
En tanto, los Sonics cederían a Baker, de 28 años y quien tiene un contrato de seis temporadas por 77 millones de dólares, con un salario de 10 millones para la próxima campaña.
Ewing, que se perdió 20 partidos por una lesión en la temporada de 1999-2000 en la que promedió 15 puntos con 9,7 rebotes, llenaría un espacio en la plaza de pívot de los Sonics, y que en la campaña pasada fue utilizada por el centro Horace Grant.
Elegido entre los 50 mejores jugadores de todos los tiempos en la NBA, Ewing ha jugado con los Knicks en sus 15 años de carrera profesional, además de integrar el primer "Dream Team" para la Olimpíada de Barcelona '92.
