ROMA.- Un gol del joven Alan Smith, de 20 años, a diez minutos del final, dio el justo premio del triunfo al Leeds en su visita a la Lazio (0-1), en un partido bien planteado por el equipo inglés, que dispuso de un mayor número de ocasiones que un conjunto romano que, desde luego, evidenció muchas dudas en su juego.
El triunfo del Leeds relanza tanto sus opciones de clasificación como genera muy serías dudas sobre las de una Lazio que, por plantilla, contaba en todas las apuestas como uno de los máximos favoritos para hacerse con el triunfo final pero que, por lo visto últimamente, y en especial hoy, vive una clara crisis de juego, moral y resultados.
Una crisis que deja aún más en vilo la continuidad del técnico lacial, el sueco Sven Goran Eriksson, ya ampliamente cuestionado por sus aficionados tras el anuncio de su marcha a final de temporada a entrenar la selección inglesa. Algo que puede verse cumplido mucho antes y, curiosamente, merced a los pies de algunos jugadores que serán sus futuros pupilos.
Ambos equipos venían de sendas derrotas en la primera jornada, ante Anderlecht y Real Madrid, respectivamente, por lo que el triunfo era algo más que necesario. Por ello, el Leeds salió determinado a dar la cara ante su ilustre rival, no limitándose a mantener su puerta imbatida. Y suyas fueron las primeras ocasiones para marcar, lo que pudo conseguir si Lombardo (16') no saca sobre la misma línea de gol un remate de Wilcox que ya había superado al meta Peruzzi.
La Lazio sufría y se mostraba lenta en la labor de creación, pese a la presencia en sus filas del argentino Juan Sebastián Verón, objeto de una rápida recuperación de la microfractura de peroné sufrida el pasado 15 de noviembre, y que jugó con una fuerte protección.
Bastó, no obstante, que Verón, bien acompañado por Nedved, pusiera sobre el césped gotas de su indudable clase para que la Lazio nivelará las ocasiones ante la meta rival. Pancaro (21'), con un desvío de cabeza al palo rival, y Salas (36'), en un remate que se colaba pero que sacó un defensa inglés, vieron muy cerca el gol.
El partido no era espectacular, pero junto a lo incierto del resultado veía también dos rivales que se enfrentaban sin miedo, con una Lazio más técnica pero con problemas a la hora de elevar el ritmo de juego y un Leeds ordenado y que al contragolpe llevaba el miedo al cuerpo de los seguidores laciales.
Un susto local que tuvo una alta dosis al borde del descanso, cuando tras una buena jugada del australiano Viduka, con posterior centro, el centrocampista visitante Bakke enviaba fuera por muy poco.
La segunda mitad vio como, según se iban apagando las fuerzas de un Verón que acusaba estar mermado físicamente, la Lazio poco a poco se iba hundiendo en la miseria. El Leeds se dio cuenta de ello y, al contragolpe, arreció su búsqueda de una meta local que ya pudo ser batida si Viduka (64') y Woodgate (66') hubieran acertado en sus remates y si el meta Peruzzi (68') no se hubiera adelantado ante Smith.
Pero Smith, tras una clara ocasión a cargo del argentino Hernán Crespo (77') que no supo superar al meta inglés, se desquitó de Peruzzi y, tras recibir de un preciso taconazo de Viduka, anotó un gol (80') que valió su peso en oro y que puede traer muchas consecuencias.
Los minutos finales apenas contaron, pues la Lazio unió un hundimiento moral a su colapso organizativo. El triunfo fue para el Leeds, que más lo mereció y le sirve para recuperar opciones de clasificación.
La derrota, las dudas y la incógnita de futuro van para una Lazio que, al menos para su fortuna, le va a venir muy bien el parón invernal. Lo que no se sabe es si en febrero estará Eriksson en el club lacial.
LAZIO: Peruzzi; Pancaro, Nesta, F. Couto, Favalli; Lombardo (Gottardi, 82'), Verón (Ravanelli, 71'), Simeone, Nedved; Salas y Hernán Crespo.
LEEDS: Robinson; Kelly, Woodgate, Radebe, Matteo; Bowyer, Bakke, Dacourt, Wilcox (Kewell, 76'); Smith y Viduka.
GOL: 80', Smith, tras recibir un pase de taco de Viduka.
