MADONNA DI CAMPIGLIO, Italia.- El alemán Michael Schumacher, cuádruple campeón del mundo de fórmula uno -1994, 1995, 2000 y 2001-, declaró este jueves que la del argentino Juan Manuel Fangio -cuyo récord histórico de cinco mundiales podría igualar la próxima temporada- “era otra época”.
“No soy amigo del pasado y las estadísticas no son mi prioridad. Ganar un quinto título es mi meta, pero no me gusta hacer comparaciones, porque los de Fangio eran otros tiempos”, declaró Schumacher.
“Es indudable que hay que valorar mucho sus éxitos porque, sobre todo si tenemos en cuenta asuntos como los de la seguridad, que era mucho menor en aquella época, sus victorias tienen un enorme mérito. Pero, aparte de esto y quitando las preguntas que me hacen sus colegas acerca de él, no le he dedicado un tiempo especial a la vida de Fangio”, respondió la estrella de la escudería Ferrari-Marlboro acerca del mítico piloto argentino, que se proclamó campeón del mundo en 1951, 1954, 1955, 1956 y 1957.
“Schumi”, que a su amplísima colección de plusmarcas añadió el año pasado la de victorias en Grandes Premios -dejándola, de momento, en 53 y superando en dos la que detentaba el francés Alain Prost- explicó que sigue con la motivación “alta” después de un largo periodo vacacional, en el que no ha descuidado su estado de forma, practicando el fútbol, iniciándose en el esquí de fondo y visitando de forma asidua el gimnasio.
“Mantener la motivación nunca ha sido un problema para mí. Siempre he vivido entre cuatro ruedas. Es mi vida. Además, estar entre los 22 ó 24 pilotos que saben pilotar un Fórmula Uno ya es un orgullo. Y hacerlo en el mejor equipo, aún más”, dijo el alemán, que no se imagina un futuro “lejos de Ferrari” y que opinó que encontrará a sus principales rivales para la temporada que arrancará el 3 de marzo en Australia en los pilotos de Williams-BMW
“La principal oposición la encontraremos en mi hermano (Ralf Schumacher) y en su compañero (el colombiano Juan Pablo Montoya). Sin olvidar a los McLaren-Mercedes. Creo que tanto (el británico) David (Coulthard) como (el finlandés Kimi) Raikkonen también darán que hablar. Pero habrá que ver cómo se adapta McLaren a sus nuevas ruedas (han cambiado de Bridgestone a Michelin). Creo, no obstante, que Williams-BMW está mejor que nunca”.
“No dudo de que otros equipos puedan llegar a ser competitivos, pero para ello creo que aún les queda adquirir bastante experiencia” dijo Schumacher, nacido hace 33 años en Huerth-Hermuelheim.
El asunto de la evolución de los neumáticos es quizá la prioridad número uno para la escudería de Maranello y tanto Schumacher como su compañero el brasileño Rubens Barrichello probarán del sábado al lunes en el circuito valenciano de Cheste, centrando en esta materia sus experimentos, en el que será su primer ’test’ oficial.
“Las vueltas que di el pasado lunes en Fiorano (donde batió su propio récord de vuelta rápida: lo dejó en 58,783 segundos) respondieron a que quería comprobar si aún sabía pilotar un monoplaza”, bromeó ’Schumi’. “En serio: quería asegurarme del estado del coche y he comprobado que ha evolucionado”, agregó el alemán, que el año pasado ganó nueve Grandes Premios: los de Australia, Malasia, España, Europa, Mónaco, Francia, Hungría, Bélgica y Japón.
“No es correcto que el equipo se centre sólo en mí. Barrichello es una parte importante en el mismo y la escudería le apoya tanto como a mí. Ferrari tiene la capacidad de fabricar dos coches idénticos, igual de buenos. Prueba de ello es que, las veces que he tenido que coger el coche de repuesto, he marcado los mismos tiempos que con el primer monoplaza. Creo que eso lo dice todo”, dijo.
“Si ha podido haber problemas, se han discutido y se han arreglado. Ahora mismo las cosas están muy claras y en el equipo reina la armonía. Tampoco decido yo quien o cuántos han de ser los probadores (al italiano Luca Badoer, Ferrari ha añadido este año al brasileño Luciano Burti). Lo que está claro es que el equipo me informa al final del día acerca de lo que se ha hecho. Hablamos sobre muchas cosas y casi siempre tenemos la misma opinión”.
“Además, Ferrari es un gran equipo dirigido por dos personas de la categoría de Jean Todt y (Luca di) Montezemolo, que saben muy bien qué tienen que hacer y qué decisiones han de tomar”, afirmó Schumacher, que admitió que al finlandés Mika Hakkinen, que se retiró al final de la pasada temporada, “se le echará de menos, porque era un gran piloto y un gran competidor”.
“El coche para la próxima temporada será completamente nuevo, a pesar de que en la reglamentación no ha habido cambios importantes. Habrá novedades en la aerodinámica y en la caja de cambios. La intención es la de salir en Australia con el monoplaza nuevo, pero también podríamos hacerlo con el del año pasado evolucionado. Aunque creo que en la primera carrera ya estará listo el nuevo”, indicó.
Schumacher valoró de forma positiva que en las escapatorias de los circuitos del mundial se sustituya la arena y la gravilla por asfalto. “Me parece bien. Siempre hay que aprender y la seguridad es un tema prioritario. En Mugello ya hemos puesto asfalto en esas zonas para adaptarnos mejor a esta circunstancia”, dijo.
El alemán aseguró que aún no se ha planteado cuándo se retirará. “La pregunta está siempre ahí, pero no tengo la necesidad de pensar en ello. Lo único que sé es que a mi alrededor siempre habrá cuatro ruedas. Hasta cuándo durará mi carrera es algo que todavía no sé”, concluyó Schumacher.
