ROMA.- La prensa deportiva italiana habla hoy de un Gabriel Batistuta furibundo después de haber disputado ayer contra Lecce apenas 20 minutos, los últimos del partido, y hace conjeturas pesimistas sobre su futuro en el club Roma.
"A quien ayer probó preguntarle una opinión sobre la decisión del técnico Fabio Capello de mandarlo de manera imprevista entre las reservas, Batistuta contestaba con una mirada de esas que hacen mal", escribe este lunes el diario Corriere dello Sport.
Según trascendió hoy, el atacante argentino está más furioso aún porque Capello le dio la noticia de que no entraría como titular pocos minutos antes del comienzo del partido, pero habría decidido no protestar públicamente, esperando que se le presente la ocasión de una próxima revancha.
Es el tercer partido consecutivo que Batistuta disputa sólo en los últimos minutos (Perugia y Lecce, por la liga italiana) o que Capello lo reemplaza después de haberlo hecho jugar más de una hora (Barcelona, por la Liga de Campeones).
La Gazzetta dello Sport califica hoy a Capello de "Pinocho" por haber afirmado el sábado que el atacante era intocable y que jugaría contra Lecce, para después hacer exactamente lo contrario, entregándole la plaza de titular a Vincenzo Montella.
Por su parte, en su sección dedicada a los lectores romanos, La Repubblica expresa sorpresa por la nueva postergación de Batistuta y escribe: "Jugó demasiado poco como para merecerse un comentario atendible".
Batistuta está atravesando, probablemente, la peor temporada desde que llegó a Italia: lleva marcados apenas 6 goles, va y viene del banco de los reservas (algo que nunca le había sucedido) y además no tendría una relación idílica con la dirigencia del club Roma, que le está buscando reemplazante.
