MONTECARLO.- La "Scuderia" italiana Ferrari, tan criticada en los últimos días, recibió hoy la inesperada y enérgica ayuda por parte de la competencia en el Mundial de Fórmula 1, puesto que el equipo Jordan le prestó su apoyo por boca de su jefe, el irlandés Eddie Jordan.
"Lo daría todo por tener los problemas de Jean Todt. Todos sentimos una envidia tremenda", dijo Jordan en un conferencia de prensa en vísperas del Gran Premio de Mónaco, que se corre el domingo en el circuito urbano de Montecarlo.
El irlandés instó a la prensa a poner fin a sus críticas a Todt y Ferrari: "Dénle una oportunidad al hombre, está haciendo un brillante trabajo y lo están matando".
El mismo Jordan estuvo una vez en la situación de que sus bólidos ocupasen el primer y segundo lugar en un Gran Premio, y entonces aplicó el orden jerárquico. Fue en el Gran Premio de Bélgica de 1998, disputado en el circuito de Spa-Francorchamps, cuando el alemán Ralf Schumacher recibió instrucciones de no adelantar al británico Damon Hill, que iba en cabeza.
