SEUL.- La entidad madre del fútbol, la FIFA, le prohibió este domingo a la selección de Argentina retirar la camiseta número 10 para el plantel de la Copa del Mundo, algo que los sudamericanos querían hacer en homenaje a su ex capitán Diego Maradona.
La decisión, tomada por el comité ejecutivo de la FIFA, se contradice con la recomendación que había hecho el comité organizador del Mundial Japón-Corea del Sur 2002, en la que había indicado que no había problemas con el pedido de Argentina.
"Mientras que ayer (sábado) el comité organizador opinaba que se debería hacer una excepción, hoy (domingo) el comité ejecutivo no compartió esa idea", dijo el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, indicando que ye se les había comunicado la decisión final al respecto a los argentinos y que éstos la habían aceptado.
"Quizás para la próxima Copa del Mundo u otras competencias de la FIFA seamos un poco más flexibles, diciendo que un equipo puede inscribir a 23 jugadores con numeración de 1-100, 1-30, 1-25 o la que sea", explicó el suizo Blatter en conferencia de prensa.
"Pero como estamos a tres, cuatro, cinco días del inicio (de la Copa del Mundo Japón-Corea del Sur 2002) pienso que no era el momento adecuado para hacerlo", agregó.
El número 10 probablemente sea adjudicado al guardameta Roberto Bonano, del Barcelona de España, uno de los tres porteros del plantel, y que pensaba vestir el 24 de ser aceptada la solicitud de los argentinos, que están entre los favoritos a ganar el torneo.
"Es una situación graciosa porque esta vez el número 10 de Argentina será utilizado por alguien que podrá usar las manos", bromeó Blatter, en referencia a uno de los dos goles que Maradona anotó en la victoria de 2-1 frente a Inglaterra en el Mundial de México ’86.
En esa ocasión, el árbitro no advirtió que Maradona golpeó el balón con uno de sus puños, convalidó el gol recordado como "la Mano de Dios", por unas declaraciones realizadas por el astro después del partido, y Argentina avanzó en el torneo, en el que finalmente obtuvo su segundo título del mundo.
Retirar las camiseta de los ídolos del pasado es una tradición común en el deporte norteamericano, aunque nunca ha ocurrido en el fútbol internacional. El ex club italiano de Maradona, el Napoli, dijo recientemente que no volvería a utilizar el número 10 como señal de respeto al argentino.
Maradona, campeón del mundo juvenil en 1979, justamente en Japón, y que llevó a la gloria a su país con la conquista del título en México '86, volvió a clasificar a la selección argentina a la final de la copa siguiente en Italia '90, donde perdió la final ante Alemania.
Cuatro años después fue expulsado de la copa de Estados Unidos '94 tras dar positivo un control antidopaje, por un coctel de sustancias prohibidas, tras el partido frente a Nigeria, en la primera ronda del torneo. Ese fue su último partido oficial para la selección albiceleste.
Desde entonces, el principal encargado de lucir el tradicional número 10 fue el también habilidoso Ariel Ortega, quien jugará su tercer mundial, aunque en esta ocasión recibió el 23 en la numeración dada inicialmente.
