MEXICO.- Decenas de reporteros juegan al "gato y el ratón" en el aeropuerto de la capital para conseguir alguna entrevista de los jugadores de la selección mexicana que regresan del Mundial dispersos y a escondidas.
Una gran incertidumbre reina entre los medios por la desinformación acerca de la llegada de los jugadores, que están llegando por separado con sus familias.
Horas después de la derrota de México ante Estados Unidos un canal de la televisión local aseguró que el técnico Javier Aguirre había explicado a los jugadores que tenía los boletos de avión y los entregaría a quienes quisieran regresar.
Mientras unos se mantienen en la sede del Mundial, otros como el goleador Jared Borgetti, el volante Ramón Morales y el portero suplente Oswaldo Sánchez ya están en el país.
Borgetti, el mejor jugador del ataque mexicano con dos goles, llegó anoche con la máxima discreción al aeropuerto de Ciudad de México y se trasladó de inmediato a Torreón, norte del país, donde vive.
Igual sucedió con Morales y Sánchez, custodiados por agentes de seguridad en prevención de alguna reacción de los aficionados mientras esperaban viajar a Guadalajara.
Se espera que una parte del grupo llegue este miércoles, pero ni siquiera la Federación Nacional tiene información sobre quienes regresarán, lo cual ha llevado a los periodistas a hacer guardias en el aeropuerto.
Versiones periodísticas aseguran que el técnico Javier Aguirre viajará directo a España, donde dirigirá al club Osasuna en la próxima temporada, mientras jugadores como Alberto García Aspe permanecerán en Corea.
