BUENOS AIRES.- El técnico chileno de River Plate, Manuel Pellegrini, no da su brazo a torcer. Tampoco da por perdida su batalla contra la hinchada "millonaria", la que comenzó a cargarle la mano tras las derrotas consecutivas contra Banfield y Lanús.
"No vine a fracasar", dijo este viernes Pellegrini, en alusión al mal momento que vive en el club riverplatense, ya descartado de la lucha por el título en el torneo de Apertura.
Pellegrini expresó su confianza en superar los inconvenientes y que no se arrepiente de haber llegado a un club tan exigente como el de la banda roja. "Cuando yo tomé River, tuve varias ofertas del exterior que desde el punto de vista económico eran más importantes, más teniendo en cuenta el momento complicado de Argentina, pero preferí este club y no me arrepiento en lo más mínimo. Yo no he fracasado en todos los clubes que pude dirigir y no vine a fracasar a River, una institución de lujo", dijo el entrenador a radio Cooperativa.
Asimismo, el chileno se mostró tranquilo, recordando que antes le tocó vivir momentos muy agradables en San Lorenzo, donde en 2001 obtuvo el torneo Clausura y la Copa Mercosur.
"Un entrenador debe entender que va a pasar momentos malos", dijo.
Pellegrini intentó buscar una explicación para el bajo rendimiento de su equipo en el actual certamen, recalcando en la partida a España del volante Eduardo Coudet: "La salida de Coudet nos desarmó. El influía mucho dentro y fuera del campo. Pero en dos semanas tuvimos que armar todo de nuevo y quedamos eliminados de la Copa Sudamericana y perdimos el campeonato en casa, con Huracán y Talleres. Digo de local porque vamos primero en la tabla de visitantes", declaró.
