DÜSSELDORF.- El argentino Gastón Gaudio explotó hoy y criticó la actitud de su compatriota Guillermo Coria en el seno del equipo de la Copa del Mundo en Düsseldorf, reabriendo en público el enfrentamiento entre ambos jugadores, los dos mejores tenistas de su país.
Gaudio, en una conferencia de prensa ofrecida después de que ganara su partido contra el chileno Fernando González, se quejó de las decisiones unipersonales de Coria, al que no citó por su nombre. "Me cansé, hay que decir la verdad, esto no es un equipo, porque hay alguien que toma las decisiones eligiendo lo mejor para él", dijo.
Coria retrucó a Gaudio, afirmando que las decisiones sí se toman en equipo. "Me sorprende, él sabrá por qué lo dice, pero obviamente, esto no auyda mucho que digamos".
Reconoció que las relaciones son distantes. "Es de respeto, de decirnos hola cuando nos vemos, pero todo el mundo sabe que no somos amigos".
En esta semana en Düsseldorf, las diferencias entre Coria y Gaudio quedaron evidenciadas ya que en el hotel cinco estrellas que comparten, apenas se dirigen la palabra, no comparten los desayunos y evitan todo contacto en todas las apariciones en público.
La disputa entre ambas estrellas viene de lejos y se ha repetido esporádicamente a lo largo de los últimos años, con problemas en los torneos de Viña del Mar en 2001, en Buenos Aires en 2003 y en Hamburgo ese mismo año, cuando estuvieron a punto de irse a las manos tras jugarse las semifinales.
Gaudio, actual campeón de Roland Garros del año pasado tras ganarle la final justamente a Coria, reabrió la polémica hoy protestando por el hecho de que su compañero, capitán del equipo en Düsseldorf, decidiera no jugar "el partido más importante de esta ronda" contra Chile, afirmando que estaba cansado.
El lugar de Coria debió ser ocupado por Guillermo Cañas, en el partido contra Nicolás Massú, "a pesar de que está casi afiebrado".
"Es cierto, estoy enfermo, tuve fiebre, tengo tos, no pude dormir bien las últimas dos noches y ahora empiezo a tomar antibióticos", reconoció Cañas después de haberle ganado a Massú, "pero Guillermo (Coria) dijo que estaba peor, tocado en una pierna y con el hombro cargado, por eso jugué".
Cañas intercedió en la disputa de sus dos colegas, reconociendo que "es difícil integrar en un equipo a dos grandes jugadores". El diez del mundo catalogó el ambiente en el equipo de "bueno".
En su ataque hacia Coria, Gaudio dijo que "entendía que un jugador esté cansado y de cara a Roland Garros decida descansar, yo también lo hice, pero no en el partido más importante", dijo Gaudio.
"Pero las decisiones acá no se toman por el conjunto del equipo, son unipersonales", agregó Gaudio, que no cuestionó el sistema de rotación aplicado en el torneo, pero sí la forma en cómo se toman las decisiones.
De círculos allegados al equipo argentino, integrado además de Coria, Gaudio y Cañas también por Juan Ignacio Chela, trascendió que en la víspera al partido de hoy "todos los jugadores le pidieron a Coria que jugara ante Chile, pero éste remitió a su fisioterapeuta, Iván Gutierrez, con el resultado de que hoy no jugó".
Además, las molestias fueron porque Coria no fue a presenciar hoy los partidos con los que Gaudio y Cañas alcanzaron el pase a la final.
Coria lamentó que Gaudio hiciera las declaraciones en público: "Es una lástima, es preferible hablarlo de cara a cara, pero eligió otro camino".
Lo que quedó evidenciado en Düsseldorf, apenas cuatro días de iniciarse Roland Garros, es que el éxito deportivo es diametralmente opuesto a una buena relación entre los jugadores argentinos.
