Caras largas en Barcelona: Real Madrid podría ser campeón.
Agencias
LA CORUÑA.- El Barcelona perdió hoy sábado por 2-0 en su visita al Deportivo de La Coruña y puso el título de la Liga española en manos del Real Madrid, que mañana sería campeón si vence al Athletic de Bilbao y el Villarreal no gana en el campo del Betis.
Si logran un triunfo ante el equipo de Mark González, los dirigidos por Manuel Pellegrini se alejarán a cuatro puntos de los catalanes y estarán más cerca de asegurar su clasificación a la Liga de Campeones.
La trigésimo cuarta jornada del torneo, a cinco del final, mostró la peor cara del Barcelona, que llegó a La Coruña pensando en el partido del martes ante el Manchester United, de la Liga de Campeones. Jugó con ocho suplentes, que justificaron tal condición, dejando al equipo en la tercera posición, a 11 puntos del Real Madrid y a uno del Villarreal.
En cambio, el Deportivo de La Coruña justificó plenamente su gran momento, conquistó su quinto triunfo consecutivo y se metió de lleno en la lucha por la Copa de la UEFA. Mereció el triunfo porque sumó muchas más ocasiones que su rival y porque apenas sufrió en defensa.
El Barcelona acaparó la posesión del balón en la primera parte, aunque su dominio fue inútil porque su circulación de balón es tan lenta que sus rivales defienden con total comodidad. En cambio, el Deportivo sí supo qué hacer con la pelota y mereció llegar al descanso con ventaja, aunque no lo consiguiera.
El Deportivo jugó con mayor velocidad en la segunda parte, en la que barrió al Barcelona. A los 54 minutos llegó el primer gol local, cuando el equipo gallego combinó en el área, Lafita centró atrás y Juan Rodríguez marcó desde el área chica, evidenciando la indolencia de los jugadores del Barcelona.
Era el castigo justo para un Barcelona decepcionante, con Thierry Henry a la cabeza. El delantero francés apenas olió el balón, desaprovechando la enésima oportunidad de recuperar el vuelto.
La sentencia llegó a los 76 minutos: Wilhelmsson puso una falta en el área y Pablo Amo marcó desde cerca tras otro error de la zaga barcelonista.
