MONTLUCON (Francia).- El cilcista español Carlos Sastre superó en la decimonovena etapa el último trámite antes de la afrontar la "batalla de Saint Amand Montrond", donde este sábado terminará la decisiva contrarreloj que le puede dar la gloria de ganar el Tour de Francia o la decepción de quedarse con la miel en los labios después de su hazaña en L'Alpe D'Huez y conquistar el maillot amarillo.
Ahora o nunca. Esto lo sabe el madrileño que espera tranquilo y consciente el momento de la verdad.
Su colchón respecto al australiano Cadel Evans es de 1.34 minutos, poca diferencia tratándose de un especialista contra el cronómetro. Ya nadie le puede quitar el sueño de haberse vestido de amarillo, pero el español no se rinde y anuncia que se dejará todo lo que lleva dentro.
A pocas horas del momento más importante en sus 10 años de profesional, Sastre repasó sus sensaciones vividas en los últimas días y habló del día "D".
"La cuestión psicológica es muy importante porque saldré con referencias. Cancellara saldrá por delante y sabremos cada kilómetro cómo voy. Dependeré de mis fuerzas y de mi confianza. Estoy tranquilo y relajado. Siempre soñé con esta posibilidad y quiero aprovecharla. Llega al gran día y me toca luchar en solitario. Estoy listo para ello", aseguró el hispano.
Sobre el desgaste de la prueba gala que le podría pasar la cuenta mañana, Satre señaló que "lo único que puedo decir es que me encuentro bien físicamente y que voy a dar todo lo que tengo dentro para intentar ganar este Tour".
