El día que un pequeño pueblo argentino fue desordenado por 47 hinchas de la UC

SANTIAGO.- Eran las 15:30 horas y un bus se detuvo a las afueras del pequeño local comercial "La turca" ubicado en el pequeño balneario argentino de Sampacho. De a poco comenzaron a bajarse personas uniformadas por alguna prenda alusiva a Universidad Católica. Eran 47 hinchas que viajaban en bus para asistir al Centenario para ver el partido entre su equipo y Peñarol por la Copa Libertadores.

Al principio nada raro pasó. Ellos pasaban dinero y el dueño del local, Daniel Lobillo, les entregaba los productos. Pero algunos, aprovechando que ellos eran muchos y él uno solo, empezaron a sacar cervezas que no pretendían pagar.

"Entraron dos, tres… Primero compraron. Luego, unos me distrajeron y los demás empezaron a abrir la heladera y sacar cervezas. Y salían con la mercadería, sin escrúpulos. A esa altura eran ya como 15", contó Lobillo al diario Mundo D.

"Estaba solo. Entonces llamé a mi novia. Traté de frenarlos, quise ir al colectivo (bus), pero decidí que no porque me iban a sacar todo. Logré sacarlos de adentro y llamé a Gendarmería. Llegaron al minuto, pero el micro ya había partido... Lo detuvieron antes de que salieran del pueblo", agregó.

En ese momento comienza la segunda parte de la historia. Capturados con las manos en la masa, los fanáticos, que contaban con el tiempo justo para llegar a Montevideo, debieron pagar lo robado. La suma ascendía a unos 23 mil pesos, según relata Lobillo.

Pero eso no fue todo. La policía trasandina optó por chequear identidades. Se dieron cuenta que algunos no tenían permisos migratorios y, además, que el bus excedía su capacidad en dos personas. Igual, la impaciencia de 47 hinchas, en una comisaría de un pueblo pequeño se empezaba a notar demasiado.

"La comisaría está cerca de un colegio, La Consolata, y con tanto lío hubo que cerrar las calles. Fue un operativo importante para un pueblo de 10 mil habitantes", relató Lobillo.

Al final cerca de las diez de la noche, sin deudas, los cruzados siguieron su aventura rumbo a Uruguay, que esperan termine con otro triunfo más de la UC en el extranjero.