LONDRES.- Wembley, mágico escenario a la altura de la competición de fútbol más antigua, acoge este sábado la final de la Copa de Inglaterra entre el Manchester City y Stoke, los dos últimos equipos que probarán ese césped antes del gran desenlace de la Liga de Camppeones.
Tras vencer en semifinales al vecino adversario Manchester United por 1-0, el City se colocó a un solo paso de alzar su primer trofeo en 35 años, después de la Copa de la Liga conseguida en 1976, un reto al que prevé apuntarse el argentino Carlos Tévez.
El capitán del equipo regresó al terreno de juego el martes tras una baja de un mes por una rotura fibrilar. Disputó los últimos siete minutos. Su entrenador, Roberto Mancini, había anticipado que era condición indispensable que el internacional albiceleste jugara en el encuentro previo a la final.
Ese requisito lo cumple. "Carlos está mejorando. En este momento no sé (si será titular). Vamos a ver qué pasa y decidiremos el sábado por la mañana", señaló en la rueda de prensa previa al partido Mancini, de 46 años, que en su país ganó seis Copas de Italia como jugador y cuatro como entrenador.
Éste confesó que "es un momento muy importante" en su carrera, pues se trata de su primera final en Inglaterra. En la final se homenajeará al ya fallecido Neil Young, autor del gol que permitió al City levantar la Copa de Inglaterra en 1969, bajo las órdenes del entrenador Joe Mercer.
Mientras, seguidores del Stoke, ahora dirigido por Tony Pulis, rememorarán el momento de mayor gloria de su equipo, cuando ganó en 1972 el único gran trofeo de su historia: la Copa de la Liga. Con el primer objetivo de la temporada cumplido -la presencia en la Liga de Campeones la próxima campaña por primera vez en la historia del club-, el City aspira a satisfacer los deseos de su propietario con un título y demostrar que su enorme inversión ha valido la pena.
Un cierto malestar se instaló hoy en Inglaterra, donde la prensa critica la coincidencia de esta final de Copa con un jornada decisiva en la Premier League, donde el Manchester United podría coronarse campeón pocos minutos antes de arrancar el desenlace de la otra competición.
La explicación a esa coincidencia es la exigencia de la UEFA de que no se utilice el césped de la final de la Liga de Campeones para ningún partido durante los 14 días previos a ese duelo, que tendrá lugar este año también en Wembley el 28 de mayo.
