Patricio Jerez, el dueño de la banda izquierda de Colo Colo que estuvo a punto de dejar el fútbol

SANTIAGO.- Patricio Jerez llegó a Colo Colo a inicios de este año con la intención clara de ocupar la banda izquierda que dejó vacante Roberto Cereceda. Y cumplió su intención. El jugador, que arribó desde Huachipato, logró convencer al técnico Américo Rubén Gallego y hoy es uno de los indiscutidos dentro de la oncena titular del cuadro albo 2.0, como le llaman en Macul.

"No sé si me ayudó que se haya ido Cereceda. Creo que gracias a mis actuaciones me gané el puesto y el 'Tolo' confía en mí. Nunca me esperé esto tan rápido porque adaptarse al equipo más grande de Chile es complicado. Ahora no debo soltar la camiseta y seguir trabajando", revela el lateral.

Pero el actual momento de Jerez contrasta con lo que vivió en sus primeros meses en el profesionalismo. El jugador estaba en las inferiores Palestino, cuando abruptamente decidió dejar la actividad para dedicarse a los estudios, porque no veía un reintegro económico.

Ingresó a la Universidad las Américas para seguir la carrera de Educación Física y aunque parezca paradójico fue ahí donde volvió a reencantarse con la pelota.

"En la universidad me encontré con el cuerpo técnico de Claudio Borghi, en la época en que el 'Bichi' dirigía la selección de alumnos. Él tenía mucha ligazón con Fernando Vergara, quien estaba a cargo del equipo del Instituto Nacional y le dijo 'tengo un chico aquí, todavía es juvenil, puedes probarlo'", recuerda.

Sin embargo, no lograron llegar a un acuerdo económico que le permitiera dejar los estudios y desistió de partir al equipo que en ese entonces competía en Tercera División.

Pero ese momento marcó un punto clave en la carrera de Jerez, porque ahí conoció a Fernando Vergara, quien con el tiempo se transformaría en una especie de padrino futbolístico del lateral.

Cuando el DT llegó la siguiente temporada (después de Instituto Nacional) a dirigir a Magallanes se contactó con el jugador para incluirlo en el proyecto del cuadro "Carabelero" que el año 2008 buscaba ascender a la Primera B.

"Vergara fue un pilar fundamental en mi carrera. Después de Magallanes hablo de mí en Huachipato y me fui para allá. Fue un poco complicado, porque es un equipo formador de jugadores y que llegue un chico de Tercera División a quitarle un cupo a uno de cadetes era difícil. Pero hicieron un seguimiento y gracias a Dios me fue bien. Recalé en allá con el objetivo de triunfar y llegar a un grande, por lo que estar en Colo Colo es un objetivo cumplido", rememora el pequeño lateral.

¿Y los estudios? "Dejé la universidad para darme una última oportunidad en el fútbol. Mis estudios están congelados, me quedan dos años y tengo pensado estudiar de noche", avisa Jerez, quien aspira a estar en alguna nómina de Borghi en la "Roja".

"Primero que todo la idea de la selección no me vuelve loco. Lo primero para mí es ganarme la camiseta de titular de Colo Colo, ser el indiscutido lateral. Si de ahí llega algún llamado, bienvenido sea. Uno siempre aspira a vestir la camiseta de la selección, pero lo tomo con mucha tranquilidad", afirma.

En su paso por Talcahuano, Jerez hizo muy buenas migas con el nuevo refuerzo de Universidad de Chile, Nelson Rebolledo, con quien revela tener una relación muy cercana y lo amenaza. "Cuando juguemos el clásico habrá alguna apuesta e invitaremos a comer a nuestras familias", cuenta entre risas.

El lateral dice haber rescatado algo de todos los técnicos que ha tenido en su carrera. Aparte del ya mencionado Vergara, estuvo bajo las órdenes de Arturo Salah y ahora de Américo Rubén Gallego.

"Salah me marcó mucho, porque aparte de un técnico te trata muy bien como persona. El 'Tolo' tiene su manera de trabajar y tiene un carácter especial. Se ve enojón ante las cámaras, pero es un siete. Si te reta no es para que te amurres, sino con el bien de que el jugador se supere", concluye Patricio Jerez.