SANTIAGO.- Los directorios de los bancos Santiago y Santander, ambos controlados por el Santander Central Hispano de España (BSCH), formalizaron ante la autoridad bancaria una petición de fusión a breve plazo, informó un comunicado conjunto difundido este miércoles.
El visto bueno, extendido por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, podría demorar unos dos meses, mientras se examina la documentación, según fuentes del organismo, cuya principal exigencia a las partes es la acreditación de solvencia.
La unión del Santiago y la filial local del Santander dará origen a un ente que será el segundo mayor banco del país, con un patrimonio bursátil de 3.598 millones de dólares, una suma de capital y reservas de 1.340 millones de dólares, y participación de 27,7% en las colocaciones.
Para la fusión, los directorios establecieron en 52,5% la valoración del Santiago y en 47,5% la del Santander-Chile.
El nombre del banco naciente, que entraría en operaciones en el segundo semestre del año, no ha sido determinado aún.
La fusión fue acordada por los directorios el martes, tres semanas después de que el BSCH adquiriera de manos del Banco Central el 35,45% del paquete accionario del Santiago, con una inversión de 682 millones de dólares.
La compra aumentó a 78,95% la participación del BSCH en la propiedad de la compañía.
En el primer trimestre de 2002, Santiago ganó 48,3 millones de dólares y Santander-Chile obtuvo 41,6 millones de dólares.
Unos 1.000 empleados perderían sus puestos de trabajo en la actual nómina total de los 7.700 funcionarios de ambos bancos, según informes de sindicatos.
