MONTEVIDEO.- El vicepresidente uruguayo, Luis Hierro, defendió el viernes la decisión de su gobierno de dejar flotar libremente el peso para intentar reactivar la economía y descartó que la depreciación de la moneda genere presiones inflacionarias.
"Ha subido ayer (jueves) un poco el dólar naturalmente, pero yo le diría que en un tono de mesura y de calma (...) pensamos que el proceso se puede administrar bien sin que tengamos una tendencia inflacionaria", dijo el funcionario a la radio argentina El Mundo.
El jueves, Uruguay anunció que abandonaba su sistema cambiario de bandas. que
aplicó por más de una década, para dejar flotar libremente su moneda, como parte de un intento por revivir a una economía en recesión desde hace tres años.
La medida, criticada por los sindicatos y la oposición, tuvo lugar justo cuando el Fondo Monetario Internacional (FMI) evalúa aumentar su asistencia financiera al país en US$ 1.500 millones.
El gobierno uruguayo ya aplicó una serie de reformas pedidas por el organismo.
En el mercado mayorista, el peso uruguayo perdió el jueves 9,57%, a 19,00 unidades por dólar, contra un cierre previo de 17,18 pesos por dólar.
Hierro aseguró que el FMI no impuso la medida de la libre flotación de la moneda, tal como hizo con Argentina en febrero, según ha reconocido el propio gobierno argentino en alguna ocasión.
Tras la devaluación del peso argentino, que fue declarada en enero, y su libre
flotación, que comenzó en febrero, la moneda perdió cerca de un 70% de su valor frente al dólar, lo que desembocó en un repunte de la inflación.
"Esta (por la libre flotación) es una alternativa que se viene pensando hace dos años y se manejó en otras circunstancias y no como vinculada a una negociación con los organismos internacionales sino como una decisión propia", dijo Hierro.
Los precios minoristas de Uruguay acumulan un alza en los 12 meses a mayo de
6,49%, contra una meta del gobieron para todo el 2002 de 10% que, según varios
analistas, será superada.
