TOKIO.- La bolsa de Tokio regresó temporalmente y por primera vez en ocho jornadas a los 10.000 puntos, ayudado por los avances de ayer en Wall Street y el abaratamiento del yen.
A última hora del día, el índice selectivo Nikkei de los 225 principales valores avanzó 200,22 puntos o un 2,04 por ciento, hasta cerrar en 9.999,79 puntos.
El indicador Topix, que reúne todos los valores de la primera sección ganó 20,81 puntos o un 2,17 por ciento, hasta 980,79 puntos.
La mañana se inició con una tendencia alcista originada en el optimismo comprador por los avances de ayer en Estados Unidos, el primer comprador de las exportaciones japonesas, y el alza del dólar frente al yen.
El Nikkei subió en su mejor momento a los 10.043,30 puntos pero no se pudo sostener sobre ese nivel presionado por el letargo que domina las negociaciones en vísperas del tradicional período vacacional japonés del ’’obon’’ que se inicia la próxima semana, dijeron los expertos.
El volumen de negociaciones fue 754,00 millones de acciones, frente a los 644,15 millones de ayer.
Los valores en ascenso sobrepasaron a aquellos en descenso por 1.301 contra 119, mientras que 69 valores no registraron cambio.
Con excepción de las aerolíneas todos los sectores subieron, en especial los fabricantes de caucho, instrumentos de precisión y automóviles.
Toyota avanzó un 4,84 por ciento, seguida de Mitsubishi (+4,44%), Mazda (+4,01%), Nissan (+2,99%) y Honda (+2,83%).
El Banco de Japón anunció antes del cierre bursátil que mantendrá su política monetaria de bajos tipos de interés y amplia liquidez para la banca.
El grupo Tokyo-Mitsubishi Financial registró un alza del 0,99 por ciento, mientras que el Mizuho Holdings ganó un 1,15 por ciento.
Los escándalos empresariales repercutieron de forma notoria en los títulos de Nippon Meat Packers (-11,8%), implicada en un caso de falsificación para obtener ayudas oficiales destinadas a las firmas perjudicadas por la aparición en Japón del mal de las vacas locas.
El fabricante de alta tecnología Fujitsu cayó un 0,6 por ciento por la decisión de la Agencia de Defensa de excluirlo de sus licitaciones en relación con un caso de filtración de información militar.
