SAN CRISTOBAL.- Los presidentes de México y Estados Unidos, en mangas de camisa y con el cuello abierto, se reunieron hoy y prometieron sostener una mayor cooperación en el combate al narcotráfico, en temas de inmigración y de explotación de recursos energéticos.
Sin embargo, no hablaron sobre compromisos específicos, pero sí sobre una "prosperidad compartida" para Estados Unidos y México.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, llegó a México en su primera gira presidencial al exterior, con la esperanza de forjar una nueva alianza, basada en "la cooperación, creatividad y respeto mutuo".
Bush fue recibido por el presidente mexicano Vicente Fox y miembros de su gabinete a la llegada del avión presidencial estadounidense en una ceremonia protocolar efectuada en el aeropuerto internacional del Bajío.
Después de una breve ceremonia de protocolo, en la que se interpretaron los himnos nacionales, los gobernantes viajaron posteriormente al Rancho de San Cristóbal, ubicado a 340 kilómetros al noroeste de la capital mexicana.
Ambos Presidentes se reunieron posteriormente a puerta cerrada, donde discutieron formas para mejorar las relaciones entre ambos países, así como temas de inmigración y de combate al narcotráfico.
Al finalizar el encuentro, sostuvieron una conferencia de prensa en la que hablaron los cancilleres y los presidentes de ambas naciones.
Bush empleó palabras en español para ejemplificar la calidez de las relaciones que busca construir con su vecino del sur.
