ISLAMABAD.- Las autoridades de Pakistán ordenaron hoy a los refugiados afganos que acampan en las cercanías de algunas zonas especialmente sensibles que las abandonen, en previsión de posibles atentados.
La medida se ha aplicado especialmente en lugares colindantes con el aeropuerto de la ciudad paquistaní de Quetta (centro-norte de Pakistán), en cuyas inmediaciones se concentran varios miles de refugiados, especialmente en el paso fronterizo de Chaman.
Asimismo, un vuelo de las líneas aéreas de Pakistán que cubría la ruta Lahore-Quetta, fue desviado como medida de precaución, dijeron fuentes oficiales paquistaníes.
El aviso de desalojo afecta en particular a los miles de refugiados afganos que, carentes de cualquier tipo de documentación, se hacinan en improvisados campamentos hechos con tiendas de campaña en las localidades de Khrotobad y Killighazi, próximas a Quetta.
Fuentes policiales comentaron que la medida se había tomado por la propia seguridad de los refugiados afganos, debido a que ésta "es una zona muy sensible".
Estados Unidos puede llevar a cabo un ataque inminente contra Afganistán en respuesta a los atentados del pasado 11 de septiembre contra las Torres Gemelas y el Pentágono, que causaron casi 6.000 muertos y de los que Washington acusa al presunto terrorista saudí Osama bin Laden, protegido del régimen talibán afgano.
Desde que estalló la crisis de los atentados, Pakistán, el único país que aún mantiene relaciones diplomáticas con los talibán, ofreció su "pleno apoyo" a Estados Unidos en la coalición antiterrorista que encabeza Washington para atrapar a Bin Laden.
Esta decisión ha irritado a integristas islámicos en Pakistán que simpatizan con el régimen de los talibán, y en las últimas semanas han protagonizado diversas manifestaciones antinorteamericanas por todo el país.
