BRASILIA.- La Policía Federal descubrió fábricas de cocaína controladas por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en inmediaciones del territorio brasileño, según un informe divulgado el domingo por el periódico Folha de Sao Paulo.
De acuerdo con la publicación, el descubrimiento fue revelado en un informe policial como parte de la operación Cobra, lanzada para luchar contra el narcotráfico en la frontera de Brasil con Colombia.
El informe fue entregado el pasado 29 de septiembre a los organismos de seguridad del estado para su evaluación y envío a Colombia, Estados Unidos y agencias antidrogas.
El director general de la Policía Federal, Agilio Monteiro, contactado por teléfono por la AP el domingo, se abstuvo de confirmar el informe, pero anotó que no es la primera vez que se investiga la relación de grupos guerrilleros con las drogas.
"La Policía Federal investiga y está alerta a cualquier posibilidad de que grupos de narcotraficantes o de guerrilleros pretendan establecerse en territorio nacional para desencadenar acciones como las que sufre Colombia", dijo.
Tras iniciarse una masiva operación de lucha contra el narcotráfico y la guerrilla en Colombia, con apoyo financiero de Estados Unidos, el Gobierno brasileño puso en marcha una masiva movilización policial y militar a la zona fronteriza para impedir que insurgentes y narcotraficantes ingresen a territorio nacional para seguir con sus actividades delictivas.
Los laboratorios presuntamente controlados por las FARC de Colombia en las cercanías de la frontera de Brasil tendrían una capacidad mensual de producción de 45 toneladas de clorhidrato de cocaína que son exportadas a Europa, Estados Unidos, Asia y otros mercados de consumo, entre ellos algunas ciudades brasileñas.
El comisario de la Policía Federal en Manaus, Mauro Spósito, manifestó que "no tenemos dudas de las relaciones de las FARC de Colombia con el narcotráfico, lo que se constituye en una amenaza en la zona fronteriza brasileña".
El informe agregó que los laboratorios bajo control de las FARC se encargan de purificar toneladas de pasta de cocaína que reciben de Perú y de Bolivia antes de exportar la droga a otros mercados.
Según organismos especializados en la lucha contra las drogas, las FARC y el narcotráfico suscribieron una alianza mediante la cual intercambian dineros y armas por drogas.
