WASHINGTON.- El "Talibán estadounidense", John Walker Lindh, capturado en Afganistán por el ejército de Estados Unidos, fue acusado este martes de "conspiración para matar estadounidenses", dijo el fiscal general de Estados Unidos, John Aschcroft.
En una demanda presentada en un tribunal en Alexandria, la corte federal de Virginia, "Estados Unidos acusa a Walker por (...) conspiración para matar ciudadanos estadounidenses en el exterior, especialmente estadounidenses en el conflicto en Afganistán", indicó Ashcroft a periodistas.
"Está acusado de involucrarse en un complot para matar norteamericanos fuera de Estados Unidos, en contra de la ley y con conocimiento de causa", señaló el informante sin suministrar su identidad.
Walker, de 20 años, también está acusado de "proveer material de apoyo y recursos a organizaciones internacionales designadas terroristas, incluyendo Al Qaeda; e involucrarse en transacciones prohibidas con los talibanes", la milicia islámica que gobernó la nación asiática hasta hace pocos meses, dijo Ashcroft.
Con estas acusaciones, Walker puede ser condenado a cadena perpetua. Cuando se le preguntó a Ashcroft por qué no se acusaba a Walker de haber cometido un crimen capital, el fiscal general respondió: "los crímenes de los cuales tenemos evidencias sirven de base para hacer esa acusación".
Las autoridades optaron no hacerlo comparecer ante un tribunal militar, sino ante la justicia civil, porque, como explicó Ashcroft, "según la orden militar emitida por el presidente (George W. Bush), la misma es para tratar a no ciudadanos de Estados Unidos".
Ashcroft dijo que la demanda federal está basada en declaraciones orales y escritas no coercitivas y "voluntarias" que Walker hizo mientras estaba bajo custodia del Ejército estadounidense a bordo del USS Bataan, un barco anclado en el Mar Arábigo.
El portavoz del Pentágono, Bryan Whitman, dijo a la AFP que los detalles respecto a la transferencia de Walker a custodia del Buró Federal de Investigaciones (FBI) todavía estaban siendo tratados.
Ashcroft dijo que los cargos de los que se acusa a Walker no son ni "casuales (ni) caprichosos".
"Quizá nunca sepamos por qué le dio la espalda a nuestro país y nuestros valores, pero no podemos ignorar lo que hizo. La juventud no es una absolución para la traición", agregó.
Walker fue capturado durante un violento motín en una cárcel del norte de Afganistán.
