BELEN, Cisjordania.- El cerco del ejército israelí a la basílica de la Natividad de Belén llegaba a su fin el martes, pocas horas antes de un encuentro en Washington entre el primer ministro israelí Ariel Sharon y el Presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
El ejército israelí comenzó a desmantelar el dispositivo frente a la basílica de la Natividad, que tiene sitiada en Belén, donde una solución negociada es esperada de modo inminente, constató un periodista de la agencia AFP.
Los soldados israelíes bajaron de los techos de los edificios que rodean el Santo Lugar los potentes proyectores que habían instalado al comenzar el asedio, el pasado 2 de abril.
El ejército también desmontó una grúa utilizada para dominar el complejo alrededor de la basílica, la que está ahora tendida en al Plaza del Pesebre, sobre la que da el templo.
Por otro lado, los militantes pacifistas internacionales que se hallaban dentro de la basílica pudieron por primera vez subir al campanario sin provocar los disparos de los francotiradores de élite del ejército israelí.
La noche pasada, ambas partes llegaron a un acuerdo, negociado por diplomáticos norteamericanos y europeos, que prevé la expulsión de 13 palestinos de los más buscados por los servicios israelíes hacia Italia, en tanto que otros 26 deben ser enviados a una prisión de Gaza.
El resto de sitiados serán dejados en libertad.
El movimiento islamista palestino Hamas rechazó el acuerdo para el levantamiento de cerco.
"Este acuerdo es sumamente grave, es una gran catástrofe", declaró, desde Gaza Abdelaziz Rantissi, un dirigente de Hamas, a la televisión satelital qatariota Al-Jazira.
"El enemigo israelí está privándonos de nuestra legitimidad, de la legitimidad de nuestra presencia en Palestina. La Autoridad Palestina está aplicando esta política", explicó Rantissi.
Rantissi también acusó a la Autoridad Palestina de "lanzar una guerra contra la resistencia" palestina.
Altos dirigentes de la seguridad palestina penetraron en la basílica para anunciar las cláusulas del acuerdo y reunir a los asediados para una liberación inminente, precisó Al Madani.
Entre estos dirigentes figuraban Tony Salman, un abogado miembro de los negociadores palestinos, y Ribhi Arafat, representante de la Autoridad palestina y hermano del presidente Yasser Arafat.
Salman, contactado por la AFP indicó que "el acuerdo fue aceptado por todos los palestinos que se encuentran al interior" de la basílica.
Los dos salieron de la basílica acompañados de dos religiosos hacia las 06H30 (03H40 GMT) y se detuvieron en la plaza del Pesebre, observó un corresponsal de la AFP.
Allí se reunieron con oficiales israelíes que bajaron de sus jeeps.
La escena se desarrollaba ante los blindados israelíes y bajo el deslumbrante resplandor de potentes proyectores.
Según la radio pública israelí, de los 13 palestinos que deberían ser expulsados a Italia, 10 forman parte de los Tanzim, presentados por Israel como pertenecientes a un brazo armado de Fatah, movimiento del presidente Yasser Arafat.
Entre los 10 aplestinos, cuatro integran uno de los servicios de seguridad de la Autoridad palestina.
Los otros tres palestinos son miembros de Hamas, principal mvimiento islámico palestino. Todos están acusados de estar implicados en cruentos atentados anti-israelíes en Cisjordania o en territorio israelí, según la radio.
