BUENOS AIRES.- El ex presidente argentino Raúl Alfonsín renunciaría en las próximas horas a su banca de senador nacional para dedicarse a pleno a la actividad política en medio de la crisis que atraviesa su partido, la Unión Cívica Radical (UCR), según informa hoy la prensa local.
El dirigente radical y estrecho colaborador del senador, Raúl Alconada Sempé, admitió que "existe la posibilidad de que el doctor Alfonsín deje su banca de senador".
El político indicó al diario "Clarín" que el ex mandatrio quiere tener más tiempo para dedicarse a "la política libre" y "encontrar el ámbito donde pueda ser más útil, donde hacer mejor la política", aunque sin abandonar su militancia en el radicalismo.
Alfonsín cree que "va a ser más útil en el partido que en el Parlamento", señaló en tanto otra fuente de la UCR, horas antes de que se realice un plenario partidario que podría definir el futuro de la agrupación que actualmente es presidida por el gobernador de la provincia de Chaco, Angel Rozas.
El tradicional partido argentino padece varias fisuras internas tras el fracaso del gobierno de Fernando de la Rúa, que llegó al poder como líder de la Alianza UCR-Frepaso, y por los cuestionamientos de diversos sectores del respaldo parlamentario que se otorgó al peronismo en enero para designar como sucesor en la Jefatura de Estado a Eduardo Duhalde y apoyar sus proyectos en el Congreso.
Esta alianza parlamentaria se fisuró en los últimos debates en el Congreso de la legislación que reclamaba el Fondo Monetario Internacional (FMI), al dar quórum pero no respaldar con su voto la modificación de la ley de quiebras y la derogación de la norma de subversión económica.
Según las fuentes radicales citadas hoy por la prensa, Alfonsín "se cansó" de las divisiones internas en el radicalismo y del desgaste que supone aparecer ’’votando leyes polémicas todos los días’’.
De acuerdo a sus colaboradores, permanecer en el Senado supondría una traba para Alfonsín para intervenir de forma activa en la crisis del partido.
Hace unos días, el bloque radical en el Senado se fracturó, tras la salida de un grupo de cuatro legisladores, liderado por Rodolfo Terragno.
Otras fuentes, citadas por el diario "La Nación", señalaron que "Alfonsín está muy en la línea de fuego, el partido no le responde".
"Nunca tendría que haber ido al Senado", lamentaron, al recordar las elecciones generales de 1999 en las que el ex presidente fue votado senador por la minoría en la provincia de Buenos Aires. En esos comicios, Duhalde fue el ganador en la disputa para llegar al Senado en la influyente provincia argentina.
"Se ha convertido en un centro de ataques permanentes, de la oposición y de sectores del empresariado. Hay programas que se dedican a pegarle sólo a él", agregaron.
Alfonsín fue presidente argentino entre 1983 y 1989, el primer período democrático tras la última dictadura militar. Al final de su mandato debió dejar el poder seis meses antes de lo previsto en manos de su sucesor electo, el peronista Carlos Menem, ante la profunda crisis de hiperinflación que sacudía al país.
