BOGOTA.- El gobierno del Presidente colombiano, Andrés Pastrana, rechazó una exigencia de las FARC de canjear a decenas de políticos y militares en poder de ese grupo por rebeldes en prisión, dejando ese asunto en manos de Alvaro Uribe, quien asumirá el poder el próximo 7 de agosto.
’’Consideramos que la exigencia de las FARC es totalmente inaceptable y en lo que respecta a este gobierno no habrá canje alguno’’, dijo a los periodistas el vicepresidente de la República y ministro de Defensa, Gustavo Bell.
A su vez, el titular de la cartera del Interior, Armando Estrada, señaló que no es posible efectuar el canje reclamado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, 17.000 efectivos), ya que ello supondría ’’una afrenta para el país y una humillación para los secuestrados’’.
’’No se puede igualar la situación de unos insurgentes encarcelados por haber violado la ley, con la de otros colombianos de bien que fueron capturados contra su voluntad’’, enfatizó Estrada en declaraciones a la prensa.
El ministro del Interior dijo que ’’si las FARC tienen un real interés de liberar a las personas que mantienen en cautiverio, pues debieran comprometerse seria y sólidamente en un proceso de paz’’.
Por su parte, el presidente electo Uribe, un duro crítico del proceso de paz y de las actuaciones de las FARC, dijo durante la campaña proselitista que no cederá a las presiones de los guerrilleros y que sólo dialogará si cesan los ataques.
Varios legisladores próximos a Uribe han señalado que éste tampoco aceptará la exigencia rebelde de emitir la ley de canje, por considerar que ello equivaldría a ’’legalizar el delito’’.
Las FARC reiteraron este viernes su exigencia de emitir una ley de canje en un video divulgado por la televisión, en el que se aprecia a un gobernador provincial, dos ex ministros, un legislador y varios militares secuestrados por los rebeldes.
Las FARC remitieron a los telenoticieros el video grabado en distintos lugares de Colombia, en el que aparece el gobernador de Antioquia (noroeste), Guillermo Gaviria; el ex ministro de Defensa y consejero de paz de esa departamento, Gilberto Echeverri; el congresista Oscar Lizcano; el ex ministro de Desarrollo, Fernando Araújo; y unos doce militares, secuestrados en diversas acciones en los últimos años.
Gaviria y Echeverri fueron secuestrados el pasado 21 de abril cuando encabezaban una multitudinaria marcha contra la violencia en Antioquia, departamento del que es capital Medellín, la segunda ciudad en importancia de Colombia.
Lizcano se halla cautivo desde el 11 de agosto de 2000, mientras que Araújo fue capturado el 4 diciembre del mismo año.
Además de esas personas, los rebeldes exigen canjear mediante una ley a otros legisladores y a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, secuestrada por las FARC el pasado 23 de febrero cuando intentaba ingresar por tierra a la antigua zona despejada de 42.000 km2 al sur del país, sede de los frustrados diálogos de paz entre el gobierno de Pastrana y ese grupo.
Pastrana rompió las conversaciones el pasado 20 de febrero, alegando que las FARC son un movimiento terrorista y carecen de voluntad de reconciliación.
Tras el fin del proceso de paz, los rebeldes desataron una ola de atentados contra diversas localidades, incluida Bogotá, y, en el último mes, emprendieron una campaña de amenazas contra los alcaldes del país, a los que exigen dimitir de inmediato, so pena de secuestrarlos o matarlos.
Desde que se inició esa campaña, han renunciado unos 120 alcaldes, mientras que las amenazas alcanzan a 6.400 concejales, según cifras oficiales.
El gobierno de Pastrana reconoce que en 200 de los 1.098 municipios colombianos no hay presencia de la fuerza pública.
