GUAYAQUIL.- El Presidente ecuatoriano, Gustavo Noboa, inauguró hoy oficialmente la II cumbre de mandatarios sudamericanos en la ciudad de Guayaquil, instando enérgicamente a una mayor y más efectiva integración entre los países de la región.
"Es auspiciosa la coincidencia de que la cumbre se realice en Guayaquil", dijo Noboa al inicio de la ceremonia, convocando a un trabajo conjunto de los países sudamericanos para enfrentar los inéditos desafíos que presenta el siglo XXI.
"Si queremos superar de verdad el subdesarrollo y todas sus secuelas, en las que la ignorancia y pobreza la mas preocupantes", señaló.
"América Latina sigue caracterizándose por su extrema vulnerabilidad", dijo Noboa, al denunciar las dificultades impuestas por los países del primer mundo por las medidas proteccionistas y los subsidios agrícolas, instando a plantear modificaciones en la política para "posibilitar un desarrollo armónico y sustentable para los países emergente".
El mandatario anfitrión hizo un fuerte llamado a favor de la integración regional e instó a sus pares a superar todas las diferencias para avanzar en la consolidación de un frente común que permita avanzar en el diálogo con los otros bloques mundiales.
El presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, hizo, por su parte, un fuerte llamado a la unidad latinoamericana para avanzar conjuntamente hacia donde "la globalización no sea tan excluyente, la solidaridad no solamente una palabra y donde la democracia no sea un credo para sólo aplicar a los demás.
En su intervención en el marco de la ceremonia inaugural Cardoso se salió del discurso original e improvisó su mensaje, aplaudido en varios tramos, en especial en sus alusiones a la preservación del sistema democrático y el avance de la integración regional.
"Nos juntamos no para aislarnos sino para tener mas peso en las decisiones de este mundo (...) y hay que reconocer que los avances no han sido grandes", dijo el mandatario brasileño.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, advirtió sobre los riesgos que, a su juicio, entraña para Sudamérica la concreción del Area de Libre Comercio de América (ALCA) que impulsa Estados Unidos. Advirtió que el proyecto puede servir "para la desintegración".
"El ALCA es peligrosa desde el punto de vista que si no se negocia bien puede ser un mecanismo de integración desintegradora, que integre a los grandes y desintegre a los pequeños", dijo.
Diez presidentes asisten al encuentro que culminará mañana sábado con la firma del Consenso de Guayaquil sobre Integración, Seguridad e Infraestructura para el Desarrollo y la Adopción de la Declaracion sobre la zona de paz sudamericana.
