MOSCU.- El Presidente ruso, Vladímir Putin, se negó hoy a claudicar ante las exigencias chechenas y afirmó que el asalto de un comando guerrillero a un teatro de Moscú "se planificó en centros terroristas extranjeros".
En sus primeras palabras tras el asalto, Putin aseguró que las fuerzas de orden público tienen como "primer objetivo" la liberación de los centenares de rehenes "con garantías para su seguridad".
Fue la primera intervención pública de Putin, divulgada por la agencia Interfax, tras la conmoción que sacudió a toda la población del país tras la toma del teatro Dubrovka en la noche del miércoles.
"La primera información con la que salieron portavoces de los terroristas que tomaron anoche rehenes en Moscú vino del exterior", subrayó Putin al reunirse con el director de los servicios secretos, Nikolái Pátrushev, y el ministro del Interior, Borís Grizlov.
Ese hecho "demuestra una vez más que el acto terrorista se planeó en el exterior", enfatizó.
Putin calificó la toma de rehenes en el teatro Dubrovka como "la acción (terrorista) de mayor envergadura no sólo en Rusia, sino también" en el resto del mundo, según la agencia.
"Nadie tiene duda de que son los mismos delincuentes que durante muchos años han aterrorizado Chechenia y que ahora exhortan al cese de las operaciones de combate", manifestó Putin.
Los terroristas que secuestraron a "varios centenares de rehenes han sembrado la muerte y la destrucción en Chechenia y fuera de sus límites y ahora pretenden expandirla más allá", dijo.
Putin trató de tranquilizar a la población al puntualizar que "el primer objetivo de nuestros servicios de orden público a la hora de planificar sus actividades apunta a liberar a los rehenes con las máximas garantías para su seguridad".
