JERUSALEN.- Al menos 10 israelíes murieron en un atentado suicida perpetrado este jueves por la mañana por un kamikaze palestino en un autobús que circulaba por la parte oeste de Jerusalén, un ataque que obligó al Primer Ministro israelí Ariel Sharon a reunirse urgentemente con sus responsables de seguridad del Estado.
Ocho de los heridos se encuentran en estado grave y fueron transportados a diversos hospitales de la ciudad, según el último balance policial. Entre las víctimas y heridos hay niños, indicó un responsable del Magen David Adom, el equivalente israelí de la Cruz Roja.
Ariel Sharon está reunido con los responsables de los servicios de seguridad "porque (el Estado) responderá rápidamente" al atentado suicida perpetrado este jueves, indicó a la AFP su portavoz, Raanan Gissin.
"Entre otros, Sharon se reunió con el ministro de Defensa, Shaul Mofaz y fueron dadas las órdenes adecuadas al ejército", explicó.
"Israel debe responder rápidamente para poner fin a esta nueva ola de atentados terroristas", añadió.
Según el comandante en jefe de la policía israelí, Shlomo Aharonichki, "una carga muy importante de explosivos fue activada en la parte delantera del autobús por un kamikaze" cuando el vehículo circulaba por el barrio Kiryat Menachem, en la parte oeste de la ciudad.
El alcalde de Jerusalén, Ehud Olmert, acusó al líder palestino Yasser Arafat de este atentado suicida, que todavía no fue reivindicado.
"Arafat es directamente responsable de este acto. Todos los días hay decenas de alertas sobre atentados, que en su mayor parte son desbaratados", dijo a los periodistas.
"Los terroristas están en guerra contra nosotros, pero debemos tratar de seguir viviendo lo más normalmente posible con este peligro", agregó.
Este fue el tercer atentado contra Israel en 11 días. El pasado 10 de noviembre, un ataque contra un kibbutz del norte de Israel dejó cinco muertos, entre ellos una joven madre y sus dos hijos de 4 y 5 años, asesinados en su dormitorio por un palestino que logró escapar.
El 15 de noviembre, un grupo de palestinos tendió una emboscada a colonos judíos y soldados en Hebrón (sur de Cisjordania) cuando volvían de las oraciones del Shabbat, día sagrado según la tradición judía. Nueve militares y tres colonos murieron en el ataque.
El último atentado perpertrado en Jerusalén se produjo el 31 de julio y tomó como blanco a la Universidad Hebrea de Monte Scopus.
Según un portavoz del ministerio israelí de Relaciones Exteriores, el atentado de este jueves descarta por ahora cualquier discusión sobre el plan de paz elaborado por el Cuarteto para Oriente Medio (Estados Unidos, ONU, Rusia, Unión Europea).
Dicho plan, adoptado en sus grandes líneas el 17 de septiembre en Nueva York, prevé fundamentalmente la creación por etapas de un Estado palestino hasta el año 2005. La versión definitiva de este proyecto iba a ser adoptada en diciembre, durante una conferencia cumbre del cuarteto, según el coordinador especial de la ONU para Medio Oriente, Terje Roed-Larsen.
Poco antes del atentado, varios jeeps y un tanque israelí entraron el jueves de mañana en la ciudad palestina autónoma de Belén (Cisjordania) y detuvieron a varios habitantes de la ciudad.
Además, este jueves, un dirigente del Movimiento de resistencia islámica palestino, Hamas, Abdel Aziz Al Rantissi, pidió que continuaran los atentados contra objetivos israelíes.
"Dichas operaciones deben continuar (...). No hay motivos para que se detengan", declaró al canal de televisión quatarí Al Jazira.
"La gran mayoría del pueblo palestino es favorable a ellos", dijo do que "la resistencia es el único camino para la liberación".
"Hay que matar a todos los criminales sionistas", concluyó el dirigente de Hamas.
