LONDRES.- El Primer Ministro británico, Tony Blair, y su ministro del Interior, David Blunkett, anunciaron hoy la creación de una agencia de seguridad encargada de perseguir a grupos delictivos locales dedicados al tráfico de drogas y a operaciones de fraude.
El nuevo organismo policial contará con 5 mil detectives privados e investigadores, que operarán contra crímenes organizados de gravedad, excluyendo el terrorismo y los asesinatos en serie.
La medida es la primera en su tipo desde 1964, año en que se establecieran las actuales divisiones y tareas de las 43 fuerzas policiales en Inglaterra y Gales.
La nueva agencia reemplazará al actual National Crime Squad (NCS) y al Servicio Nacional de Inteligencia (NCIS), además de realizar tareas del Departamento de Inmigración y Aduanas.
Tras anunciar la medida, Blunkett declaró que las organizaciones criminales "generan millones de dólares por el tráfico de personas, como también de drogas".
"Estos grupos controlan imperios criminales, muchas veces con bases en diferentes países y debíamos crear un organismo que luchara para detenerlos. Por esa razón decidimos lanzar un equipo más organizado, que trabaje con elementos de sofisticación y que sea técnicamente capaz de capturar a estos criminales", agregó el ministro.
Roy Ramm, ex jefe de la Unidad contra el Crimen Organizado (OCU), declaró que la medida "es muy positiva", porque "aunará las fuerzas de seguridad".
Sin embargo, el portavoz del partido Liberal Democrático, Mark Oaten, declaró que el gobierno "ha fallado en el pasado para coordinar el trabajo de nuevos organismos de seguridad".
"Esperemos que esta medida no sea un paso para la creación de una fuerza policial nacional", afirmó el vocero.
