La Habana.- El Arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega Alamino, recibió un trato "seco y descortés" en el aeropuerto de Miami (EEUU), donde fue retenido durante tres horas la pasada semana, según la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba.
El trato dado al Cardenal por parte de los funcionarios de Inmigración del aeropuerto de Miami "fue seco y descortés", pero "no hubo ningún tipo de referencia" a sus criterios sobre la situación política en Cuba o en Estados Unidos, de acuerdo con una nota emitida hoy por la Conferencia.
El incidente se registró el pasado día 25, cuando Ortega, que también es presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba y tiene pasaporte diplomático emitido por el Estado Vaticano, viajó a Miami por razones familiares para una estancia de tres días.
En el aeropuerto, oficiales de Inmigración pretendieron abrirle algo similar a un "expediente de peligrosidad" con preguntas que él rechazó contestar.
Ante su negativa, los funcionarios le advirtieron de que era una condición para entrar en EEUU, a lo que el cardenal contestó que podía regresar a Cuba en el siguiente vuelo.
Finalmente, tres horas después de su llegada, una funcionaria le informó de que se le había otorgado una visa de treinta días de estancia en Estados Unidos.
El comunicado de la Conferencia aclaró que la causa del incidente no fue que se hubiera intentado revisar su equipaje, ni tampoco se habló de "orden de deportación", sino que fue el cardenal quien planteó volver de inmediato a la isla.
Ortega permaneció tres días en Miami y regresó a La Habana sin problemas el pasado lunes, concluyó la nota.
El pasado 14 de enero, el canciller de Argentina, Rafael Bielsa, fue retenido en el aeropuerto de Miami tras protestar por el retraso de seis horas de un vuelo.
