BOGOTA.- Las autoridades responsabilizaron a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por el reciente asesinato de la hermana del ex secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) y ex presidente César Gaviria, tras identificar a cinco sospechosos relacionados con el crimen.
"Se establece claramente que la autoría está en cabeza de las FARC por intermedio del grupo narcoterrorista de la Teófilo Forero", dijo el viernes el director de la policía nacional, general Jorge Castro, en conferencia de prensa.
Las autoridades afirmaron que identificaron a cuatro hombres y una mujer, presuntamente integrantes de la columna Teófilo Forero, una de las estructuras más crueles y profesionales de las FARC.
No se conocieron detalles del vínculo que tendrían los detenidos con esa guerrilla izquierdista, la mayor del país.
Identificaciones
Las autoridades colombianas anunciaron que identificaron a los cinco autores materiales del asesinato de Liliana Gaviria, hermana del ex presidente y ex secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA) César Gaviria.
El general Oscar Naranjo, de la Policía Nacional, informó que se trata de un grupo delictivo que iba a entregar a Gaviria a la columna móvil Teófilo Forero, una especie de batallón elite de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Según Naranjo, el líder del grupo es Javier Rendón y con él fueron identificados Armando Barbosa, escolta del jefe de la columna Teófilo Forero; Beatriz Villalba, conductora de carro donde fue llevada raptada Gaviria; Alexander Puerta, quien hizo labores de inteligencia previas al fallido intento de secuestro, y Norbey García.
Naranjo dijo que ninguno de los miembros del grupo fue capturado.
La Fiscalía General, de acuerdo a la versión oficial, llegó hasta una casa del municipio de Dosquebradas, en el departamento (estado) de Risaralda, donde estaba acondicionada una especie de "cajón con barrotes" en el que retendrían a Gaviria.
La hermana del ex presidente falleció el viernes pasado cuando un comando intentó secuestrarla a balazos en Pereira, capital de Risaralda, y la hirieron de muerte cuando asesinaban a su guardaespaldas.
La señora Gaviria fue introducida en un carro del que fue arrojada luego en una carretera cuando sus captores se dieron cuenta de que estaba muerta.
