Liberan dos de los pesqueros atrapados por el hielo en costas rusas

MOSCÚ.- Dos de los cinco barcos rusos varados en el mar de Ojotsk (Lejano Oriente ruso) con medio millar de personas a bordo fueron liberados hoy del hielo y pudieron proseguir su travesía hacia la costa, informó la Agencia Federal de Pesca (AFP) de Rusia.

El rompehielos "Admiral Makárov" rescató al pesquero "Mys Elizavety", mientras el barco frigorífico "Antón Gurin" logró romper por si mismo el hielo que le impedía surcar las aguas desde el lunes.

"Los dos buques (con una tripulación de más de cien personas) navegan por aguas limpias a una velocidad de seis nudos", aseguró Andréi Kraini, director de la AFP de Rusia y coordinador del rescate, según la agencia Interfax.

Al parecer, ahora ha quedado atrapado el rompehielos "Magadán" cuando intentaba rescatar a los otros tres buques varados desde finales del pasado año en el Ojotsk, mar que se encuentra entre la península de Kamchatka, la isla de Sajalín y el archipiélago de las Kuriles.

El "Magadán" (88 metros de eslora y 13.000 caballos de potencia) intentó en solitario rescatar a esos barcos, pero no pudo romper la gruesa capa de hielo y encalló a unas tres millas de estos.

Las autoridades portuarias han ordenado al "Admiral Makárov" (135 metros y 36.000 caballos) que rescate al rompehielos antes de proseguir el rescate de los otros barcos, que se encuentran a unas 12 millas de la costa.

Esos tres barcos atrapados son los pesqueros "Sodruzhetsvo" (340 tripulantes) y "Bereg Nadezhda", y el buque científico "Profesor Kisevetter".

Ante la creciente inquietud entre las tripulaciones de los barcos, el Primer Ministro ruso, Vladimir Putin, se comunicó ayer con el capitán del "Sodruzhetsvo" para prometerles que la ayuda llegaría en las próximas horas.

"Les ayudarán. Aguante aún un día más", dijo el Premier, a quien el capitán aseguró que los barcos tienen comida y agua para resistir varios días.

Las temperaturas, que rondan los 20 grados bajo cero en la zona, no han dejado de descender en los últimos días, lo que complica mucho el rescate debido al aumento de la formación de hielo bajo los cascos de los barcos.