NUEVA YORK.- Siete hermanos de entre 11 meses y 11 años murieron en el incendio registrado en la granja rural en la que vivían en el noreste de Estados Unidos, del que sólo un niño de la familia logró salvarse.
El fuego arrasó la finca situada cerca de Blain, en el estado de Pensilvania, mientras los padres estaban fuera de la vivienda.
Según la cadena "ABC", uno de los niños, de 3 años, avisó a su madre, que se encontraba ordeñando las vacas en el establo.
Ambos corrieron para alertar al padre a la camioneta en la que repartía leche en la zona y cuando llegaron a la casa, el fuego había devorado las la vivienda, según la fuente.
Las autoridades estatales investigan las causas del incendio, que fue controlado por los bomberos.
La familia pertenece a la comunidad menonita, la rama más antigua de las iglesias evangélicas, que rechazan las influencias del mundo moderno y propugnan el pacifismo.
