EL CAIRO.- Las Fuerzas de Seguridad de Siria mataron hoy jueves a 24 civiles y ampliaron su ofensiva contra los opositores al régimen en la ciudad de Damasco.
De las víctimas, entre ellos un niño, perecieron en la ciudad de Homs, Hama y en la provincia de Idlib.
"Algunos de los heridos no se atreven a ir a los hospitales", denunció un activista residente en El Líbano. Por eso, sólo reciben tratamiento básico en clínicas provisionales.
Asimismo, el Ejército del Presidente Bashar al-Assad asedió los barrios de Douma y Sabqqa, donde realizó arrestos masivos.
Según Amnistía Internacional (AI), más de un centenar de personas murieron desde que la semana pasada el régimen se comprometió con la Liga Árabe a frenar la represión.
En total, más de 3.500 personas perdieron la vida en Siria desde el inicio de las protestas prodemocráticas, el pasado mes de marzo.
AI reclamó a la Liga Árabe que aumente la presión con sanciones a Siria y que impulse el envío de observadores internacionales al país. El organismo se reunirá el sábado en El Cairo para abordar la situación siria.