BEIRUT.- Violentos combates tenían lugar el miércoles en Alepo (norte), donde el Ejército intentaba recuperar el control de un bastión rebelde, así como en otras regiones de Siria bombardeadas por la artillería de las tropas del régimen, dejaron durante este día cerca de 82 fallcidos.
Según la ONG Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña, al menos 34 personas -9 insurgentes, 10 soldados y 14 civiles- murieron en Alepo, donde los enfrentamientos entre el ejército regular y los rebeldes del Ejército Sirio Libre (ESL) continuaban en el barrio de Salahedín, precisó el.
"Las fuerzas regulares sufrieron fuertes pérdidas durante esos combates, pues los insurgentes mostraron una resistencia feroz", indicó la OSDH, que recibe informaciones de una red de militantes y testigos en Siria.
Según la OSDH, 225 personas murieron el martes en todo el territorio, entre las cuales había 129 civiles, 50 rebeldes y 46 soldados leales al gobierno de Bashar al-Assad. Es uno de los balances más elevados desde que comenzó, en marzo de 2011, el movimiento de contestación que se militarizó ante la brutal represión del régimen.
En total, más de 21.000 personas perdieron la vida en casi 17 meses de conflicto, según esta organización no gubernamental.
