EL CAIRO.- El Papa copto, Teodoro II, ha instado al presidente egipcio, Mohamed Mursi, y al Gobierno a adoptar medidas concretas para enfrentar la violencia confesional en el país, donde ha denunciado que los cristianos sufren discriminación.
"La expresión de sentimientos es algo bueno, pero los sentimientos solos no son suficientes, los asuntos necesitan una acción concreta en el terreno", subrayó, en alusión a las llamadas de condolencias de Mursi y el primer ministro, Hisham Qandil.
Teodoro II, proclamado Papa el pasado noviembre, afirmó que esos días fueron "muy difíciles" ante la patente división en la población egipcia, al tiempo que calificó el ataque contra la catedral de hecho "sin precedentes".
"Los coptos son parte del tejido nacional y de la historia de Egipto como los musulmanes y, por consiguiente, cualquier problema (...) la sociedad debe resolverlo", agregó.
El papa citó "problemas agudos y otros crónicos" que sufren los coptos, entre ellos las dificultadas para construir iglesias, cuya ley relacionada todavía no ha salido adelante.
Otro problema es la discriminación para llegar a altos puestos en el Gobierno y las empresas: "No hay igualdad de oportunidades en muchos ámbitos para los coptos", lamentó.
Teodoro II tiene previsto reunirse el próximo 10 de mayo con el Papa Francisco en Roma, coincidiendo con el cuarenta aniversario de la primera visita de un patriarca copto al Vaticano, con el encuentro entre los fallecidos Shenuda III y Pablo VI.
