Manifestantes vuelven a protestar por desaparición de obrero en Río

RÍO DE JANEIRO.- Cientos de brasileños volvieron a protestar hoy por la desaparición del obrero Amarildo Souza, de quien no hubo más noticias desde que fue detenido por la policía de Río de Janeiro el pasado 14 de julio.

El acto tuvo respaldo de Amnistía Internacional (AI) y se realizó en la favela de la Rocinha, donde Souza desapareció después de que la policía le detuvo bajo la sospecha de era miembro de una banda del narcotráfico.

La pregunta "¿Dónde está Amarildo?", que se ha convertido en un lema para los habitantes de esa comunidad, fue escrita en decenas de carteles colgados en la favela.

La manifestación fue organizada por ser el primer Día del Padre, que se celebra hoy en Brasil, que su familia pasa sin Amarildo, y para presionar a las autoridades a dar respuestas sobre el caso.

"La persona que derramó la sangre de Amarildo derramó también la sangre de sus seis hijos", declaró la esposa del obrero, Elizabeth Gomes, quien participó en la manifestación junto a otros miembros de su familia.

"Si lo mataron, quiero al menos que nos devuelvan el cuerpo para poder enterrarlo", añadió Gomes.

El representante de AI en Brasil, Atila Roque, afirmó que el país "no puede vivir bajo este estado de excepción, en el que la gente más pobre es tratada de manera diferente y carece de los mínimos derechos".

Roque aseguró que el caso ha sido incorporado a la agenda de ese organismo de derechos humanos y recordó que el secretario general de AI, el indio Salil Shetty, visitó esta semana Río de Janeiro y se sumó a las voces que exigen aclarar la desaparición del obrero.

El caso cobró repercusión nacional y la ministra de la Secretaría de Derechos Humanos, María do Rosario Nunes, instó a las autoridades de Río de Janeiro a investigar el caso "a fondo".

Según dijo la ministra esta semana, "la investigación se debe hacer con la hipótesis clara y concreta de que la responsabilidad es de los agentes públicos".

Manifestó además que lo que más "preocupa" al Gobierno es el abordaje policial seguido de la desaparición, lo que cual sostuvo que ocurre con "demasiada frecuencia".

Según Nunes, "el abuso y la violencia policial es algo con lo que no podemos convivir más", afirmó la ministra.