''Todos los procesos electorales son vulnerables, pero lo importante es que haya una controlaría ciudadana para garantizar unas elecciones libres'', dijo Lugo.
EFETEGUCIGALPA.- El ex Presidente paraguayo Fernando Lugo dijo hoy en Tegucigalpa que espera que las elecciones generales de mañana en Honduras sean "una fiesta democrática" y llamó a los hondureños a ejercer el voto y alejar los miedos.
En una rueda de prensa, Lugo, junto a dirigentes del Partido Libertad y Refundación (Libre), cuya candidata es Xiomara Castro, indicó que confía en que los comicios sean "una fiesta democrática" y que se desarrollarán con "transparencia y de manera libre".
En los comicios participarán, por primera vez, nueve partidos con ocho candidatos presidenciales debido a una alianza entre dos institutos políticos.
El ex gobernante paraguayo llegó ayer a Honduras para participar como observador en los comicios atendiendo una invitación de Castro, quien es esposa del ex Presidente hondureño Manuel Zelaya, derrocado por un golpe de Estado el 28 de junio de 2009.
"Todos los procesos electorales son vulnerables, pero lo importante es que haya una controlaría ciudadana para garantizar unas elecciones libres", subrayó Lugo.
Además, señaló, que por lo que ha observado hasta ahora el proceso se desarrolla en un "ambiente de tranquilidad y de paz", por lo que llamó a los hondureños a acudir a ejercer el voto.
"Esperamos una gran participación y que todos los miedos se puedan desechar para que la gente, con absoluta garantía, pueda participar mañana en las elecciones", destacó.
En las elecciones, que serán las novenas desde que el país centroamericano retornó a la democracia en 1980 tras casi 20 años de regímenes militares, los hondureños elegirán a un presidente entre ocho candidatos que participan en la contienda.
También escogerán tres designados presidenciales (vicepresidentes), 128 diputados al Congreso Nacional, 20 al Parlamento Centroamericano con sus respectivos suplentes y 298 corporaciones municipales.
Las elecciones en Honduras serán seguidas por casi 20.000 observadores, incluidos unos 800 internacionales, entre ellos figuran los de la Organización de Estados Americanos, la Unión Europea (UE), las Naciones Unidas, y el Centro Carter.
