LA PAZ.- El presidente boliviano, Evo Morales, afirmó que no trabajará con gobernadores y alcaldes opositores, si éstos son elegidos en los comicios regionales del 29 de marzo, actitud que este martes fue considerada antidemocrática por sus adversarios.
Morales se refirió específicamente a la disputa para la alcaldía de la ciudad andina de El Alto, vecina de La Paz, y para la gobernación de La Paz, donde partidos de derecha y centroderecha lideran los sondeos.
En el municipio de El Alto, el Gobierno apuntala a Edgar Patana, que va a la reelección, y en la gobernación de La Paz a la indígena Felipa Huanca, que en las encuestas va segunda.
"¿Cómo yo puedo trabajar con la ciudad de El Alto con la gente de la derecha? Yo no voy a trabajar (con la derecha), hermanos. Si quieren más obras, ahí está Edgar Patana; si quieren más obras, ahí está Felipa Huanca", afirmó Morales en la víspera, generando el martes las reacciones de sus opositores.
"Eso no es democrático, yo tengo una posición y actuación diferente, yo trabajo con todos los adversarios políticos, yo estoy para trabajar con todos los bolivianos", dijo a el líder opositor de derecha, Rubén Costas, quien se repostula como favorito para la gobernación de Santa Cruz.
El oficialismo extendió esa posición en La Paz hacia todas las gobernaciones y alcaldías del país que elegirán a nuevas autoridades a fin de mes.
A pesar de las protestas de la oposición, Morales aprovecha sus desplazamientos por todo el país, que son a diario, para hacer campaña por gobernadores y alcaldes oficialistas.
En el eje central del país, como en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, la oposición pelea los primeros lugares.
En las elecciones de fin de mes, unos 6 millones de bolivianos están habilitados para elegir a nueve gobernadores y a más de 300 alcaldes.