VALPARAISO.- Con la asistencia del Ministro de Cultura, José Weinstein y de autores y artistas en fue aprobada hoy, por la Cámara de Diputados, el proyecto de Fomento de la Música Nacional por la cámara de Diputados.
El nuevo marco legal regulará las actividades de los músicos y contribuirá a enfrentar las problemáticas de la falta de producción discográfica chilena, la poca difusión en los medios de comunicación y la escasa posibilidad de exportación sus actividades musicales.
El proyecto de Fomento de la Música Nacional se encontraba en tercer trámite. Tras ser estudiado en la cámara de Diputados pasó al Senado, donde se le introdujeron algunas modificaciones. Por esta razón regresó a la cámara baja esta lo ratificó finalmente hoy, quedando así, aprobado por el Congreso. Ahora el Presidente de la Republica tendría que dar la conformidad definitiva, y sí no lo vetara, regresaría al Tribunal Constitucional, porque este proyecto de ley tiene disposiciones de ley orgánica.
Los autores y artistas de la SCD manifestaron su apoyo a la iniciativa, dando un guiño musical a la sesión. Arribaron al Congreso Luis Advis, Presidente de la SCD; Santiago Schuster, Director General de la SCD; Cecilia Echenique, Vicepresidenta de la SCD; Eduardo Peralta, Secretario de la SCD. Además participaron el conjunto de cueca porteña, Los Paletados del Puerto, un trío de saxos, y otras agrupaciones musicales de Santiago y de Valparaíso.
El proyecto de Ley Fomento de la Música Nacional surgió a raíz de las dificultades que enfrentan los artistas nacionales, como la falta de producción discográfica con música nacional; el bajo porcentaje de difusión de artistas nacionales en los medios de comunicaciones tales como radio, televisión, festivales, conciertos y recientemente Internet y la escasa posibilidad de exportación de la actividad musical, que permitiría insertar la música chilena en un mercado mundial cada vez más globalizado.
La importancia de la Ley se resume en lo siguiente:
Esta Ley tiene por finalidad realizar un esfuerzo especial de fomento de la música nacional. Tiene una fisonomía similar a la Ley del Consejo del Libro. Es el primer esfuerzo de carácter nacional que se llevará a cabo, para revertir las dificultades que los repertorios nacionales tienen en la producción y difusión.
La iniciativa consta de 14 artículos y complementa la Institucionalidad Cultural, que tendrá tres Consejos específicos de Fomento: Libro y la Lectura, Música Nacional; y Audiovisual y Cine (éste último aún en trámite en el Congreso)
Establece un Fondo de Fomento de la Música Nacional, dependiendo de cual será el volumen de recursos que se destinará al Fondo de Fomento de la Música Nacional.
Determina que un Consejo administrará este Fondo, y en él se integra la sociedad civil del mundo de la música, con representantes del sector de los autores y artistas, de las industrias de la música y de los medios. Asimismo, habrá representantes del sector público.
En síntesis, sus finalidades son amplísimas y cubren todos los sectores de la expresión musical, desde la música clásica hasta la música de tradición oral, y la música popular.
Además, se da rango legal a los Premios de la Música "Presidente de la República", que actualmente se conceden por Decreto Supremo.
Estímulo a los organismos de radio y televisión que difunden música nacional
Una medida que tendrá un efecto práctico inmediato consiste en una disposición que busca estimular a los organismos de radio de televisión para que difundan porcentajes mínimos de música nacional. Para estos efectos se establece un mecanismo de acuerdos voluntarios entre el Consejo de Fomento de la Música Chilena y tales organismos.
De esta manera los organismos que celebren estos acuerdos tendrán preferencia para postular a los fondos especiales que el Consejo establezca para estos efectos. Esta es una medida concreta y práctica concreta que tanto los autores y artistas, como la misma industria de radiodifusión esperan.
Otra medida, es establecer un destino especial para las grabaciones musicales el Registro de la Propiedad Intelectual mantiene un archivo inutilizado de las creaciones artísticas chilenas, sin facultad alguna de poder destinarlos a otros efectos que su custodia, deteriorándose permanentemente. Se considera la posibilidad que este repertorio pueda ser consultado en forma permanente por investigadores, por la industria y público interesados oficiales públicos.
