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Los narcocorridos, una oda al crimen con arraigo popular

La inclusión de varios de estas canciones en un libro de corridos mexicanos distribuido por la Secretaría (Ministerio) de Educación mexicano a alumnos de escuelas primarias, desató un auténtico escándalo en círculos conservadores de ese país.

02 de Marzo de 2005 | 10:32 | EFE

Los Tigres del Norte son uno de los más populares conjuntos de narcocorridos en México.
MEXICO.- Una paradoja envuelve en México a los narcocorridos: cuentan las aventuras de violentos criminales, enemigos de la sociedad que, sin embargo, cautivan a muchos mexicanos y sus temas son escuchados en la radio.

Compuestos con música norteña y cantados al estilo de los corridos de la Revolución Mexicana, narran el modo en que los personajes siembran y trafican con marihuana y cocaína, y también hablan de sus amores, de sus traiciones y de sus tragedias.

La inclusión de varios de estas canciones en un libro de corridos mexicanos distribuido por la Secretaría (Ministerio) de Educación a alumnos de escuelas primarias, desató un auténtico escándalo en círculos conservadores.

El cardenal y arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, reprobó el libro "Cien corridos alma de la canción mexicana" porque alienta "el vicio en los niños y les propone héroes falsos".

Derivado del corrido mexicano, el narcocorrido tuvo entre sus primeros exponentes a Rosalino "Chalino" Sánchez Félix, un artista de Sinaloa, estado norteño conocido como la "tierra del narco".

Su historia comenzó a los 9 años, cuando se enteró de que una de sus hermanas había sido violada en una fiesta. Entonces el pequeño juró vengarse de la afrenta.

A los 17 años "Chalino" asesinó al agresor sexual de su hermana y se convirtió en prófugo de la justicia mexicana pues inmediatamente cruzó la frontera norte y se empleó en la recogida de fruta en California.

Al poco tiempo se unió a su hermano Armando y trabajó como "coyote" (traficante de indocumentados) en la zona fronteriza de Tijuana, pero su hermano fue asesinado en 1984, lo cual le obligó a abandonar el "oficio".

Su leyenda cuenta que cuando tuvo suficiente dinero, hizo su sueño realidad: grabó su primer corrido, éste con dedicatoria para su hermano, y comenzó así con su trayectoria musical.

Gracias a su facilidad para componer y a su dominio de la música norteña comenzó a componer panegíricos a petición de los narcotraficantes.

Grabó diecinueve discos con narcocorridos pero su carrera se truncó a los 31 años, cuando murió asesinado después de una presentación en su estado natal.

Tras la estela de "Chalino" siguieron otros músicos, lo que propició que este subgénero comenzara a invadir la radio mexicana con grupos como Los Tigres del Norte y su famoso tema "Contrabando y traición".

"Salieron de San Isidro, procedentes de Tijuana, traían las llantas del carro repletas de yerba mala. Eran Emilio Varela y Camelia 'La Texana'. Pasaron por San Clemente, los paró la migración, les pidió sus documentos, les dijo de dónde son, ella era de San Antonio", dice la canción que copó los primeros lugares de popularidad radial.

Otros destacados intérpretes de narcocorridos son Los Tucanes de Tijuana y Lupillo Rivera, quien próximamente lanzará un álbum con sus canciones.

Sin embargo, y debido a la mala fama de los narcocorridos en los últimos años, éstos están vetados en algunas emisoras de radio del país, que invocan los artículos 5 y 63 de la Ley Federal de Radio y Televisión para justificarse.

El primero de ellos señala que las emisiones deben contribuir al fortalecimiento de la integración nacional y al mejoramiento de las formas de convivencia humana.

El artículo 63 prohíbe todas las retransmisiones que usen un lenguaje soez o corrupto y las contrarias a las buenas costumbres, ya sea mediante expresiones maliciosas, palabras o imágenes procaces, frases o escenas de doble sentido que hagan apología de la violencia o del crimen.

El compositor Teodoro Bello, autor de corridos como "El jefe de jefes" y "La tumba falsa", (Los Tigres del Norte), dijo a EFE que el corrido es, en general, nocivo para la juventud.

"Habla de que el narcotraficante se enriquece fácilmente, cuando es una mentira porque sucede que arriesgan la vida, los matan, los meten en la cárcel", dijo.

"Pienso que falta un poco de más cultura a la población, que tenga conciencia real de lo que pasa; yo hago el corrido no porque hable del narcotraficante, sino porque simpatizo con la historia", puntualizó.
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